Segunda | Albacete 3 - Nàstic 2
El Nàstic le hizo un regalo al Albacete de 60 minutos
Tras el 3-0 hubo amago de remontada, pero no culminó
Jugar en Segunda ya es complicado, sí. Hacerlo regalando 60 minutos ni les cuento. Eso fue exactamente lo que hizo ayer el Nàstic. Salió al campo como si la cosa no fuera con él y, antes de que se diera cuenta, ya había recibido tres goles. Sí, tres. Dos en el primer tiempo y un tercero tras el descanso.
La verdad es que hay poco que contar en clave grana, sobre todo, en los primeros 60 minutos. ¡Cómo jugaría de mal el Nàstic para que Merino se fuera a su casa con dos goles! El ex grana se ensañó con su ex y empezó a hacerlo muy pronto, a los tres minutos, tras un buen regalo de Mairata, quien tiene en los despejes su asignatura pendiente. Un gol tan madrugador hubiera espoleado a cualquiera. No al Nàstic. El Albacete se lanzó a por el segundo, pero no a base de arreones, sino teniendo el balón y, por lo tanto, evitando que lo tuviera su rival. Fruto de ese dominio llegó un penalti -dudoso porque pudo ser sólo falta- cometido por Mingo. Verza no perdonó y dejó el partido medio visto para sentencia.
El segundo acto fue más de lo mismo. El Nàstic seguía siendo un chollo, circunstancia que aprovechó de nuevo el Albacete. Jaime se inventó una gran jugada por la banda izquierda y Merino -en el interior del área pequeña con Mairata y Tortolero en modo vuelvo enseguida- marcó el tercero de su equipo y el segundo de su cuenta particular. Y, al fin, despertó el Nàstic. El Albacete desapareció del campo y empezó a verse superado por un conjunto que corría con más corazón que cabeza. Ferrando hizo cambios (Alba, Víctor y N'gal) y eso le vino bien al equipo, que empezó una tímida reacción que por muy poquito no termina en una remontada en toda regla.
Emoción.
Moisés transformó un penalti y la diferencia se redujo. En el Belmonte empezaron a aparecer las mismas dudas que hasta ayer impedían al Albacete sumar tres puntos. Y más grandes que se hicieron cuando entre Campano, Víctor y Moisés fabricaron el segundo. Pero la cosa no pasó de ahí. Susto para los locales y un Nàstic que, jugando como los primeros 60 minutos, asusta... para mal.
Martínez: "Necesitábamos los tres puntos"
"Fue un partido extraño. Lo empezamos muy bien, encarrilándolo a los tres minutos, pero se nos complicó al final. Fuimos capaces de marcarle tres goles al Nàstic, pero ellos también demostraron al final que son un gran equipo. Por poco no empatan el encuentro. Los tres puntos son justos y nos vendrán muy bien para afrontar el siguiente partido con algo más de tranquilidad. Necesitábamos sumar un triunfo, porque ya eran tres partidos sin ganar. Ahora tenemos una semana entera para disfrutarlo y preparar con tranquilidad el próximo encuentro de Liga contra el Eibar".
Ferrando: "Fue un partido para olvidar"
"Así no se puede jugar. Un partido para olvidar. Tuvimos muy poca intensidad en la primera parte. En la segunda, con más coraje que otra cosa, hicimos dos goles. De todo se aprende. Hay que salir con más fuerza, trabajar más. Sin intensidad es complicado ganar en cualquier campo de España. No nos dejaron jugar como queríamos y tuvimos que cambiar el registro. Vi muy bien al Albacete, la verdad. Me preocupan goles como el primero, que no puede entrar eso en la vida. Otra vez se repite la historia. Se ha perdido, no pasa nada, pero hay que trabajar duro".