Primera | Sevilla 4 - Sporting 3
Kanouté reinó entre dos defensas de broma
El Sporting se adelantó 0-2 y tropezó en sus errores
El caos defensivo fue un huracán destructivo. Si el partido tuvo interés fue por los desastres defensivos, los múltiples despistes imperdonables y, claro que sí, la increíble ausencia de recursos y contundencia en momentos puntuales.
No se puede confundir un espectáculo abierto y atractivo con una cascada de goles creados tras acciones estúpidas de ambas defensas. Sin seriedad atrás, todo se acercó más a un duelo a muerte de barrio entre solteros y casados. Vamos, una broma. Como bromas fueron los marcajes de Konko y Squillaci sobre los impulsos de Diego Castro y los remates de Bilic. Como las salidas de David Prieto y Drago para tapar a Maldonado, que firmó la jugada de su vida dejando tirados a dos centrales por el camino. Como el enésimo penalti de Squillaci. Como la doble cantada de Sergio y Colin. Como la ausencia de concentración de todo el costado derecho del Sporting en el gol de Kanouté. Como el regalito de Sergio en el segundo gol de Kanouté. Los interminables errores firmaron sentencias anticipadas (0-2), milagros inmediatos (2-2), emociones y euforia (3-2), desastres y hecatombe (3-3) y suspiros sevillistas y lamentos de sueños fugados (4-2).
El peso de la realidad y la calidad de Kanouté desnivelaron la cascada de tropiezos para el lado sevillista. El Sporting dio la cara, con una inteligente presión sobre la salida de balón del Sevilla y la eficacia de Bilic, que convirtió en oro lo que tocó. Matabuena y Carmelo murieron corriendo, Maldonado y Diego Castro pusieron las gotas de calidad. Pero la bisoñez destrozó las buenas intenciones. El Sporting deberá inyectarse en la sangre rabia para parecer malvado. Marcando tres goles en el Sánchez Pizjuán es un pecado mortal volver sin un solo punto.
El Sevilla vivió del potencial de sus jugadores y jugó con fuego hasta el último suspiro. Un equipo armado a base de talonario y con aspiraciones tan ambiciosas debe adueñarse de rivales, en teoría, inferiores. Mostró carencias en fichajes millonarios como Konko y Squillaci. Entre las bromas defensivas se coló Kanouté para evitar la sorpresa. Dejó al Sevilla líder y se marchó a continuar con el Ramadán.
Los campeones de Europa y de los Juegos, homenajeados
El Sevilla homenajeó, antes del inicio del encuentro, a los integrantes de su plantilla que se proclamaron este verano campeones de Europa y de los Juegos Olímpicos con Argentina. Del Nido entregó a Palop, Fernando Navarro, Fede Fazio y Acosta una distinción. Los aficionados sevillistas premiaron con un aplauso a los campeones sevillistas. El club aprovechó el estreno en casa para premiar a sus campeones. El debut en el Sánchez Pizjuán se aprovechó también para guardar un minuto de silencio en memoria de los sevillistas que fallecieron a lo largo de la última temporada. Hubo una mención especial hacia el ex presidente, Eugenio Montes Cabeza, y al que fue secretario de la entidad Pepín Moreno Suárez.
El Salzburgo cayó en Copa
El Red Bull Salzburgo, el primer rival del Sevilla en la UEFA, remontó en casa un partido de Copa que se le complicó cuando antes del primer cuarto de hora perdía 0-2 con un equipo de Segunda, el Vöcklabruck. El Salzburgo, con todo perdido, apretó para darle la vuelta con un 4-2.