¿Irá a la tercera la buena?

Si la manera con la que llegan al partido Real Sociedad y Real Murcia fuera decisiva, si dependiera de la tranquilidad y armonía que reina en Donosti (conseguida gracias a los buenos resultados y al estado de felicidad por vivir impuesta por ese hedonista futbolero que es Lillo) y por otra, de las dudas y del mal rollito instalado en el entorno grana (no hace falta repetir las causas, ni tan siquiera mirar al fondo de la tabla) está claro que el partido pintaría, y además de forma clara, en txuri urdin. Pero el fútbol, y más en Segunda División, es una ciencia inexacta en la que el 'ganador' va y se la pega, en las que el candidato a ir de funeral es capaz de revivir. A eso y agarrándose a una cuestión de estadística pura que dice que es imposible perder siempre y también jugar tan mal como lo ha hecho hasta la fecha el JaviMurcia- se agarra el Murcia para iniciar en Donosti, en la casa de otro candidato claro al ascenso, la remontada. Eso, ganar, o problemas, más problemas a la vista ya que un traspiés se puede entender (y culpar a los recogepelotas) un segundo (debido al exceso de puntas)... también, pero más no.

Quizás por esto último, o quizás no vaya usted a saber amigo lector, Clemente se la jugará con un solo punta en Anoeta. El polaco Sikora y su extraordinaria punta de velocidad, Quique De Lucas por detrás, las bandas para los 'consagrados' Capdevila y Núñez y atrás con Bruno que se estrena junto a Marcinho y el cuarteto defensivo del estreno en Vallecas (puede entrar Balogh por Lillo). Un equipo tirando a 'amarrete', con clara vocación de ir a la contra para intentar que a la tercera sea la vencida. Un equipo que recupera el dibujo del trivote, que vuelve a cambiar de patronaje y que, sobre todo, quiere cambiar la cara a la que están abonados desde el inicio: la de la decepción.

Y la Real de Lillo. Un técnico que ha logrado, a pesar, es cierto, de no haber conseguido ningún título, que sólo sea necesario dar su nombre para saber que su equipo intentará ganar... y hacerlo bonito. Con estrategia, con trabajo, con Cerio y los debus de Necati y Dramé.

Clemente desmiente sus declaraciones

A su llegada al hotel de concentración del Real Murcia en San Sebastián y abordado por los periodistas, Javier Clemente desmintió todo lo dicho el pasado jueves: "Yo no he deseado la muerte a nadie. Entérate bien antes de preguntar eso porque no he deseado que se muera nadie. Todo lo contrario". Estas fueron las palabras del técnico de Barakaldo ante la pregunta de un periodista que le cuestionó sobre si había reflexionado sobre sus desafortunadas frases. Clemente aseguró no haber dicho lo que todo el mundo ha escuchado y, sin dar opción al resto de medios allí presentes, siguió su camino hacia la recepción del hotel de concentración del Murcia en San Sebastián donde hoy se juega un encuentro importante (20:00 horas, Anoeta).