España ya eliminó a Italia en cuartos en Sydney 2000

España sí ha ganado partidos oficiales a Italia. Y lo ha hecho en tiempos de la televisión en color, incluso en la de plasma. Para más señas fue en uno de esos cuartos de final a los que nuestro fútbol mira con tanto recelo.

Corría el 23 de septiembre de 2000 en una cálida y húmeda noche en la ciudad de Sydney. Con motivo de la cita olímpica australiana, el calendario emparejó a españoles e italianos en los cuartos de final. En ambas escuadras había hombres que estarán el domingo en el Ernst Happel de Viena. Por España Xavi llevaba la manija del equipo mientras Marchena y Puyol le cubrían las espaldas y Joan Capdevila presenciaba el choque sentado en el banquillo junto al seleccionador Iñaki Sáez. En las filas italianas el timón descansaba en las manos de Pirlo, a quien secundaban los incansables Ambrosini y Gattusso, mientras Zambrotta y De Sanctis veían el partido desde el banquillo.

El encuentro comenzó mucho antes del pitido inicial. Marco Tardelli, seleccionador de Italia, había caldeado los ánimos al afirmar que "España nunca gana nada lejos de su casa. Podemos estar tranquilos, somos favoritos y estaremos en las semifinales".

Las declaraciones sentaron mal en la expedición española, que no quiso contestar al técnico italiano. Prefirieron utilizarlo como motivación antes del choque. El partido fue tenso, incluso algo bronco, porque Italia frenó el juego español con numerosas faltas. Pirlo, anunciado como baja por el propio Tardelli, apareció misteriosamente en el once titular, algo que no descompuso a Albelda, quien mantuvo a raya al cerebro de los italianos. A su lado Xavi imponía su clase en la medular. Cuando el partido apuntaba el camino de los vestuarios Tamudo pudo desequilibrar el empate inicial, pero el delantero perico no estuvo acertado ante el hoy atlético Abbiati.

España salió con más cuajo del vestuario y se hizo con el mando del partido. Cuando el partido caminaba hacia la prórroga, Toni Velamazán sirvió desde la izquierda un pase a Xavi, que vio a Gabri entrar en el área. El azulgrana sirvió un pase medido al corazón del área italiano donde Gabri controló y sacó con su derecha un disparo duro, raso y ajustado que entró tras golpear en el palo. Los jugadores lo celebraron como si de una final se tratase. España ganaba oficialmente a Italia por primera vez desde 1920. A la italiana, en el minuto 86, y en unos cuartos de final. Poder, se puede.