Güiza se libera

Grecia 1 - España 2

Güiza se libera

Güiza se libera

Reuters

Un gol cerca del final del delantero del Mallorca, que hasta entonces sólo había coleccionado errores en el remate, dio la victoria a España, la novena consecutiva de Luis Aragonés, que iguala así un récord con la Selección. Muy buen partido de Xabi Alonso, el mejor de los españoles.

Apareció afeitado por primera vez en toda la Eurocopa, como si esperara un día grande, pero cuando el partido estaba a punto de echar el cierre, Dani Güiza sólo había coleccionado un puñado de pésimos remates. Apenas faltaban dos minutos para el final cuando apareció por la derecha Sergio García, un futbolista del que siempre se puede esperar algo, para poner un balón en la cabeza de Güiza para el máximo goleador de la Liga española diera la victoria a España y se liberara de angustias y obsesiones. Hasta entonces, su aportación más productiva había sido un pase de cabeza a De la Red en el gol del empate de la Selección.

El tanto servirá para tranquilizar a Güiza y para poner a Luis Aragonés en la historia de la Selección, con la que ha logrado su novena victoria consecutiva. Iguala de esta forma el récord que estaba en poder de Manuel Castro desde los años 20, y alcanza a Javier Clemente como el seleccionador que más triunfos ha logrado con España, 36. La Selección cierra la primera fase con pleno de triunfos y de ganancias. Ya acumula 12,5 millones de euros en premios de UEFA.

Fuera del gol de Güiza y la emoción que llevó a la gradas, el partido se vivió con más tensión en las gradas que en el césped, donde la intrascendencia del resultado relajó el ambiente. Es complicado mentalizar para que actúen con intensidad a futbolistas que son conscientes de que es probable que no vuelvan a jugar en todo el campeonato. El cuento de aprovechar la oportunidad para ganarse un sitio en el once ideal de Luis Aragonés no se lo cree nadie. Y menos con una alineación tan definida como la tiene España. Todos los que saltaron al césped contra Grecia ya sabían cómo iba a acabar el cuento.

Xabi y Cesc

Quizá por ello, porque alguna vez formaron parte de ese once que tiene Luis en su cabeza, Cesc Fábregas y, en especial, Xabi Alonso se mostraron más activos, con ganas de demostrar que su sitio no está en el banquillo. El todavía jugador del Liverpool, que actuó como único mediocentro, protagonizó las mejores acciones de España. ¡Cuánto le está costando mostrar con la Roja todo el fútbol que tiene en la cabeza.

Pasados los 20 minutos estuvo cerca de lograr el gol de la Eurocopa, cuando un dispao desde su campo rozó el poste de la portería defendida por el veterano Nikopolidis, que puso fin a su aventura internacional con este encuentro y casi se deja media espalda en esa acción, al golpearse contra el poste. Si el tiro de Xabi hubiera ido más centrado, ni en siete vidas hubiera llegado al guardameta griego a despejar el balón.

Tampoco pudo hacer nada Nikopolidis por evitar que también se estrellara en el poste el obús lanzado por Alonso al poco de la reanudación. Xabi encontró en Cesc a su mejor socio y entre ambos, escoltados por un demasiado tímido Iniesta, fabricaron todo el fútbol que elaboró España en el Wals-Siezenheim de Salzburgo, en el que se vieron algunas localidades vacías en la zona ocupada por los seguidores españoles. Los que acudieron vivieron el choque con la misma intensidad que reclamaron a los jugadores en la segunda parte.

Para estar a la altura de Xabi, Cesc apareció con un pase genial cuando peor pintaba la cosa para España, poco después de la reanudación. Puso un balón desde 30 metros en la cabeza de Güiza, que lo bajó con sentido para que De la Red fusilara al oxidado Nikopolidis.

Otro fallo de marcaje

Recuperó España con ese golazo el equilibrio en el marcador que se había perdido poco antes del descanso, en otro fallo de marcaje en una falta. Se repitió el mismo error que contra Rusia, pero esta vez con once jugadores diferentes sobre el césped. España defiende mal esas acciones y contra Italia, en cuartos, no es una cuestión que se deba dejar al azar. Karagounis sacó una falta desde la izquierda y Charisteas apareció por el área para cabecear con toda la tranquilidad del mundo.

Con el empate España asumió de nuevo el mando, recuperó el control del balón y el sentido del juego. Cesc, De la Red y Xabi surtieron de balones a los hombres de ataque, por donde ya apareció Cazorla en lugar de Iniesta, pero una tras otra las oportunidades fueron malgastadas hasta que apareció Güiza para liberarse de sus obsesiones y dar la victoria a la Selección.

No hubo noticias en ataque de los laterales, Arbeloa y Navarro, y en el centro de la defensa Juanito se encargó de tranquilizar a Puyol y Marchena. Es imposible que les quite la titularidad. Como tampoco son Arbeloa y Navarro una amenaza para Sergio Ramos, por muy lejos que esté de su mejor momento, y para Capdevila.