Polonia se despide sin poner nada de su parte

La carambola era complicada. Depender de que una de las selecciones más débiles ganara a los alemanes cuando éstos se juegan la vida no es muy esperanzador. Si a eso le añadimos que, además, debes vencer a Croacia, selección que mejor encarna la lucha por una camiseta y una identidad nacional, el objetivo se sitúa a años luz. Pronto se dio cuenta de eso Polonia.

Cierto que los polacos salieron concienciados para hacer sus deberes. Se apoderaron del balón y controlaron el juego pero se ahogaban en la orilla. Este equipo no daba para más. Buena culpa de ello la tuvo Beenhakker al incrustar a Guerreiro en el centro del campo y dejar a Smolarek, el único polaco con el gol entre ceja y ceja, en el banquillo. Al cuarto de hora ya perdieron de vista la pelota. Entonces, la escondieron los croatas y comenzaron a tocar, asignatura en la que son unos aventajados. Bilic sacó a la Croacia B, pero no se notó, en eso consisten los equipos. Cambian piezas, pero la máquina funciona. Cada vez llegaban con más peligro, con Pranjic dando una auténtica exhibición de despliegue y Klasnic descubriendo las vergüenzas de una zaga lamentable en la salida y en la colocación. De eso puede hablar y mucho el meta Boruc, único responsable de que se fueran a los vestuarios con 0-0 y con las esperanzas aún sin perderse.

Pero el sueño comenzó a evaporarse en el segundo acto. Polonia comenzó a despertarse con el gol de Ballack en Viena y terminó de hacerlo cinco minutos después, cuando Klasnic aprovechó un centro de Pranjic para marcar y acordarse de todo lo sufrido con su riñón. Un problema renal estuvo a punto de arruinar su carrera. Ahora juega y marca con un riñón de su padre. Polonia pareció reaccionar con la entrada de Smolarek y los detalles de Guerreiro, pero ya era tarde. La aventura terminó para ellos. Croacia continúa y su próxima parada es Turquía. Una estación para seguir soñando.

Bilic: "Podemos ganar a cualquiera"

"No somos la primera selección en ganar todos los partidos de la primera fase, pero sí es cierto que hay muy pocas. Hoy hemos demostrado que somos una selección fuerte y completa. Este equipo puede ganar a cualquier adversario".

Beenhakker: "Mi futuro lo diré en octubre"

"Ha habido jugadores que no estaban en su mejor forma. Jugadores que marcaron la diferencia en la fase de clasificación y que aquí no han podido rendir igual. No hemos sido lo suficientemente buenos. En septiembre u octubre hablaré sobre mi futuro".

Luto en croacia por un hincha

Los jugadores de la selección croata lucieron ayer unos brazaletes negros como señal de duelo por la muerte de Marin Zubcic, aficionado de los ajedrezados de 22 años que no resistió una parada cardiaca el pasado día 12, cuando los pupilos de Bilic jugaban frente a Alemania y falleció.