"Antes de volver al Milán probaré en el Flamengo"

¿Ahora quiere volver a jugar al fútbol?

Estoy trabajando cuatro o cinco horas al día para ello. La recuperación la tengo que hacer de todas formas para jugar al fútbol en la playa con los amigos y hacer una vida normal. Pero los médicos, en el último control que me hicieron aquí en París, me han dado la esperanza que necesitaba. A dos meses de la operación la rodilla está mucho mejor de lo que estaba la otra en el mismo tiempo después de la intervención.

¿Cuántas ganas tiene de volver?

Muchísimas. No sé imaginarme una vida sin fútbol. Durante la primera semana estaba destruido, en lo físico y en lo moral. Devastado. Pero tras los primeros progresos todo comenzó a funcionar: me muevo después de haber pasado mucho tiempo como un vegetal. Todavía será largo, faltan cuatro meses para que pueda empezar a correr, pero la recuperación será mucho más rápida que la primera vez.

¿Quiere regresar al Milán?

Con mi equipo tengo una relación muy bonita: siempre tendré allí la puerta abierta, pero debo estar a la altura. La idea es volver al fútbol en Brasil, seguramente en el Flamengo. Y si todo va bien, volver a vestir la camiseta rossonera.

Para ello tendrá que bajar a un peso más apropiado...

De mi peso se habla mucho, pero nadie sabe la verdad. Los 75 kilos de cuando era un chaval no son posibles ahora, no es lo mismo. Fui campeón del mundo con 86 ó 87 kilos, más o menos como cuando estaba en el Inter. Seguro que ahora he cogido peso por la inactividad. Pero tengo la fortuna de comer sano, no me apetecen ni dulces ni glotonerías.

Se dijo que cuando usted jugaba en el PSV Eindhoven los médicos del club le dieron anabolizantes, razón por la que se ha lesionado tanto.

Eso no pasó. Se ha hablado mucho de anabolizantes que me daban para crecer: nada es cierto. De Messi dicen lo mismo. De todas formas he comprendido una cosa: no siempre la medicina deportiva tiene la mejor respuesta. En el fútbol se juegan demasiados partidos y no hay fin de semana sin una lesión importante. Habría que estudiarlo.

Si se juega un Real Madrid-Barcelona, ¿a quién animará?

Mejor el Real Madrid, donde tuve una historia más larga. Pero mi verdadero equipo es el Flamengo. Es increíble como el fútbol sabe desencadenar emociones y pasiones. Yo era como cualquier niño: intentaba conseguir los autógrafos de los futbolistas, iba a los entrenamientos e iba con mi papá a Maracaná para ver a mi equipo. Estaba Zico, un espectáculo.

¿Dónde jugará Ronaldinho?

Creo que seguirá en Barcelona, es demasiado importante. Reencontrará la continuidad, ha pasado una mala época.