Pablo Orbaiz faltará todo el mes de abril

Se confirmó el augurio negativo que provocó la retirada de Pablo Orbaiz del partido con el Recreativo. El futbolista necesitará no menos de cuatro semanas para volver a ser alineado. Sufre una rotura muscular en el muslo derecho, según reveló la resonancia magnética a la que fue sometido ayer.

Se trata de una lesión que no es habitual en la carrera de Orbaiz, todo lo contrario. El propio afectado comentaba cariacontecido en el aeropuerto de Sevilla, el domingo tras el partido, la sensación de extrañeza que le embargaba. Su inquietud obedecía a que no podía recordar haber padecido un pinchazo así, como el que le obligó a solicitar el cambio en la segunda mitad del encuentro celebrado en el Nuevo Colombino. Mientras se encaminaba hacia la puerta de embarque, se palpaba la zona afectada, la cara interior del muslo derecho, y no podía reprimir un gesto corporal que daba a entender claramente que el asunto le daba mala espina.

La naturaleza del contratiempo obligaba a esperar unos días antes de proceder a una prueba que concretase su alcance. Pero la pinta no era buena y apuntaba al diagnóstico que el Athletic dio a conocer ayer al mediodía: "Rotura miofibrilar de grado 1 en el tercio medio del recto anterior del cuadriceps derecho". Añade la nota que el período aproximado de baja oscilará entre las tres y las cuatro semanas.

Ausencias.

Esto significa que Orbaiz, en principio, no podrá ser alineado en las próximas cuatro jornadas por Joaquín Caparrós. Se perdería los encuentros contra Espanyol, Deportivo, Valencia y Real Madrid, los correspondientes al mes de abril.

Si el proceso recuperatorio discurre con normalidad, según los cálculos al uso, la reaparición podría producirse iniciado mayo y en San Mamés, coincidiendo con la visita del Mallorca. Todavía quedarían tres jornadas más del campeonato liguero, las últimas de la temporada, con los siguientes rivales: Murcia, Racing y Sevilla.

En fin, que la interrupción que este episodio supone es de carácter pasajero, no implica que la temporada haya terminado para Pablo Orbaiz. Disponer de ese aliciente, de ese puñado de partidos para disputar en el mes de mayo, ya con el equipo definitivamente fuera de peligro, sin duda le servirá de ayuda para que la rehabilitación le resulte más llevadera.