"Yo no soy de esa gente que exige jugar sí o sí"

¿Cómo ha llevado esa inoportuna lesión que le ha dejado fuera del equipo durante más de un mes?

Es un experiencia nueva y de todo se aprende, pero se pasa mal. Yo intenté tomarme las cosas con madurez y optimismo, aunque cuando estás fuera del equipo, tu cabeza no da para pensar en otra cosa que no sea en volver de lleno al trabajo. Es complicado estar en otro campo y ver a tu lado a tus compañeros trabajando a buen ritmo.

Pero se habrá quitado de encima todas esas sensaciones con su regreso contra el Real Madrid.

Sí. No podía haber pedido un mejor regreso que contra el Real Madrid, en Riazor, con la familia en la grada y además ganando el partido.

Cuando saltó al campo, ¿llegó a sentir un poco de miedo?

El ritmo del partido estaba muy intenso y a pesar de que has calentado, no lo has hecho a esa intensidad. Por eso te da un poco de miedo que te puedas volver a lesionar en la primera arrancada. Mi representante vio el partido en México y me ha dicho que cuando entré, apagó el televisor, porque tenía miedo a que me lesionara... Pero luego todo eso se olvida en la cancha. Ahora ya no tengo ningún miedo.

¿Ya se siente preparado para jugar noventa minutos?

Sinceramente, no. Yo quisiera estar noventa minutos y así poder agarrar ritmo, que es lo que me hace falta, pero sé que todavía no estoy para eso. Los puedo jugar, sí, pero terminaría muerto en los últimos minutos.

Usted no está acostumbrado a ser suplente, ¿se hace complicado verse ahora en un banquillo?

Afortunadamente, desde que debuté me dieron la oportunidad de ser titular y ya nunca más volví a ser suplente. Pero no es algo que desconozca, porque fui suplente en su momento. Ahora me voy a exigir a mí mismo para que los que están jugando sepan que vienen atrás apretando otros jugadores.

Parece que, por ahora, asume son naturalidad su situación.

Ahora y después. Yo no soy un jugador que transmita malas vibraciones, no soy de esa gente que dice que tiene que jugar sí o sí y que se joda el que está jugando. No. Uno obviamente quiere jugar, pero ya he dicho que no quiero mandar malas vibraciones. Siempre voy a apoyar al que esté jugando, que ahora son Lafita y Wilhelmsson. Los dos lo están haciendo muy bien y yo no voy a ser egoísta.

En ese puesto, ¿está muy complicada la titularidad?

Sí, está complicado ganarse un puesto una vez más. Es difícil cuando sientes que no lo has hecho mal y una lesión te deja fuera. Si hubiese salido por un bajón en mi juego, igual podía ser diferente, porque una lesión es algo que no está en tus manos. Es duro estar fuera, pero yo sigo con todas las buenas vibraciones para el equipo.

Quien está que se sale es su amigo Lafita. ¿No le parece?

Lafita está espectacular. Está jugando muy bien y ya le he dicho después del partido contra el Real Madrid que se nota que tiene la confianza a tope. Cuando crees en ti mismo, intentas cosas nuevas, caños, regates... Y todo eso le está saliendo. Yo nunca he tenido rivalidad con Lafita. No soy un jugador que se enoje cuando no juega. Obviamente, uno quiere jugar, porque no es que él esté jugando y yo diga aquí me quedo. Yo voy a luchar por mi lugar, pero la decisión queda para el entrenador. Lafita y yo siempre vamos a tener un buen rollo.

Lotina ha dicho que se plantea adaptar su esquema para que puedan coincidir Lafita, Wilhelmsson y usted.

Qué bien que se lo plantee.. Eso ya es trabajo para el entrenador. Todos queremos jugar y si Lafita y Wilhelmsson están bien, sería injusto que les saquen del equipo.

¿Usted también se puede adaptar al puesto de lateral zurdo?

También conozco ese puesto, pero no nos tenemos que desviar. Filipe también está muy bien y tiene bien ganado su puesto.

¿Cómo está viendo al equipo en los últimos encuentros?

Muy bien. En esta segunda vuelta no me he fijado bien en la tabla parcial, pero estamos casi de primeros. Eso habla muy bien de la reacción del equipo, que ha sido por varios factores, como la actitud, el nuevo sistema... Pero no podemos cantar victoria y decir que ya estamos salvados. Lotina ha dicho que no está nada hecho y es importante que nadie se relaje.

Ahora les espera el Mallorca.

Yo creo que ése puede ser el partido del despegue. Nos podemos alejar de los equipos que están con 32 puntos.

¿Ha sido un palo muy duro la eliminación de México en la fase previa de los Juegos Olímpicos?

Sí, ha sido un golpe fuerte. Con la calidad que tiene México y contra los rivales que ha jugado, tenía que haberse clasificado tranquilamente y no fue así. Es un gran fracaso. Con esta generación, podíamos haber conseguido una medalla, pero habrá que pensar en otros sueños. Me queda el mal sabor de boca de no haber podido ayudar.

Ya se cuestiona a Hugo Sánchez.

Se le cuestiona muchísimo, pero hay que esperar a ver qué pasa. Para los dirigentes es más fácil echar a un técnico que criticar a los jugadores que estaban en el equipo. Son cosas que pasan.