"No hay que hacer ningún milagro para la salvación"

El nerviosismo en el entorno amarillo sigue latente pero la plantilla ha cerrado filas para no verse afectado. Todos aguardan con el cuchillo entre los dientes el partido ante el Poli Ejido.

Gastón Casas es un hombre con una experiencia contrastada en Segunda División. El delantero es optimista porque "hay plantel suficiente para no tener problemas por abajo. Aún lamento mucho no haber conseguido una racha positiva para engancharnos arriba. La ilusión y el deseo es ganar todos los partidos y terminar lo más arriba posible. No hay que hacer ningún milagro para salvarnos".

Con el descenso a cinco puntos y con dos partidos importantes ante el Poli Ejido y Las Palmas, Casas cree que es el momento de "unirnos y apoyarnos más que nunca, si no en el futuro quizás nos estemos lamentando. No estamos en la mejor dinámica porque no ganamos partidos. En esta Liga de tres puntos hay que sumar de tres en tres. Necesitamos dos victorias seguidas para alejar fantasmas".

Sobre su situación personal el argentino prefiere no entrar en polémicas aunque reconoce que "es difícil, porque cuando las cosas te van saliendo y de repente no entras en el equipo, lo pasas muy mal. Todo jugador quiere estar dentro para ayudar. A veces no es posible, pero no depende sólo de uno". En todo caso Casas sigue sin perder la esperanza de revertir su posición en la entidad amarilla. "Creo que acabaré siéndole útil al equipo. Al menos esa es mi intención", sentencia.

El delantero argentino, que lleva siete goles en partidos oficiales con el Cádiz a pesar de haber jugado muy poco, resta importancia a los rumores sobre su mala relación con Antonio Calderón. "Se han dicho muchas cosas. No tengo ningún problema con él. Cuando tenemos que hablar hablamos. No pasa nada", afirmó.

Pudo salir en diciembre

Gastón Casas conserva un gran cartel en el panorama futbolístico. No en vano, en el mercado de invierno, un club griego y dos argentinos se dirigieron a su representante para preguntar por su situación. El delantero cadista reconoce que "surgieron cosas, pero yo seguí apostando por el Cádiz. Tenía la esperanza de que íbamos a estar más arriba. Son decisiones que uno toma y compromisos que se asumen. Por eso seguí aquí".