El Real Madrid cerró ayer por todo lo alto la campaña 'Por el fomento de la lectura infantil', que emprendió en el mes de febrero junto con el Ministerio de Cultura, la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, la Federación de Gremios de Editores de España y el Diario AS, y que ha terminado con un éxito de participación. Ayer fueron 500 niños de 166 colegios distintos los premiados sobre el césped del Bernabéu. El coliseo del madridismo abrió sus puertas para recibir a los chavales y sus familiares en un acto presidido por Ramón Calderón y la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, que compartieron el estrado de honor junto a Alfredo Di Stéfano y al director de AS, Alfredo Relaño.
Los regalos.
Calderón y Aguirre participaron activamente entregando los premios para los chavales, que no cabían en sí de la emoción por lo impresionante del escenario y los regalos recibidos: camisetas, balones, relojes, bañadores del Madrid y muchos, muchos libros, entre ellos las colecciones de la Historia del Real Madrid que aportó este diario a los principales ganadores del concurso, que consistía en aportar una continuación a un cuento iniciado por el escritor Fernando Marías.
Antes de eso, Calderón tomó la palabra para alentar a los chavales y que sigan dejándose seducir por la lectura: "Leer ilustra, amplía horizontes, enriquece la mente y es divertido. Ser buen futbolista y buen deportista no es sólo compatible, sino que es complementario". La presidenta Esperanza Aguirre se congratuló de la gran participación en la iniciativa con el deseo de que la lectura siga despertando "la imaginación, el deseo de aprender y la curiosidad" de los niños.
Sin embargo, y una vez más, fue el gracejo natural de Di Stéfano el que se ganó el mayor aplauso. "Os recomiendo leer, que los libros no muerden. Sois el futuro de este país y queremos que seáis los mejores", comentó el presidente de honor, que arrancó una carcajada general cuando le hizo otra recomendación muy particular a la chavalería presente: "Si queréis leer un buen libro... ¡os recomiendo el mío!".
