Agüero ruge a los leones

Entre líos de unos y de otros, llega un clásico, un Atlético-Athletic que será el número 70 en Liga. Casi nada. Y, como si Alí y Foreman se subieran mañana a un cuadrilátero, el estado actual de los contendientes da igual: manda la historia. Y menos mal, porque sus presentes son complicados.

Más el de los leones, a dos puntos del descenso y con la decisión de Caparrós de separar a los convocados de los descartados abriendo heridas. Pero tampoco vive días plácidos el Atleti, tras el fiasco de Bolton y con las expulsiones de Agüero pasando de anécdota a temor real. Por fortuna, ambos ganaron la pasada jornada, lo que les dio un respiro, pero el que hoy falle vuelve al fango.

Amenaza. El Athletic saldrá al Calderón con dos nombres grabados a fuego en la mente: Agüero y Forlán. Como todos, me dirán. Cierto, pero esta vez con más motivos. Resulta que ambos delanteros comparten afición por destrozar a los bilbaínos. Kun les ha metido tres goles en tres partidos (todo victorias) y el uruguayo seis en siete (cinco triunfos, un empate y una derrota). Si existen paranoias justificadas, esta es una.

A favor de los visitantes hay que decir que Caparrós ha logrado algo que la pasada temporada parecía imposible: la defensa funciona. Amorebieta y Aitor Ocio han dado estabilidad, con Ustaritz apretando hasta el punto de que cada vez que juega resulta difícil para el técnico justificar que vuelva al banquillo. Hoy mismo, esa es la gran duda, con Ocio de vuelta tras cumplir una sanción.

Aguirre tampoco lo tiene claro. Sigue con mil bajas y ha de elegir entre la clase de Jurado y el ni fu ni fa de Cléber para el medio y, en la izquierda, entre el displicente Reyes y la entrega algo caótica de Luis García. En fin, cada cual se complica la vida como quiere, pero hay decisiones más complicadas...

Juegue quien juegue, la tela estará en los ataques, porque el Athletic parece haber recuperado para la causa a Llorente, proyecto de estrella que temíamos perdida, y como su zurda funciona independientemente de su cabeza, Yeste es otra amenaza permanente. Y de Forlán y Agüero ya hemos hablado. Lo dicho, un Atlético-Athletic merece la pena siempre.

Caparrós no ha ganado en Liga en el Calderón

El Calderón es un campo maldito para Joaquín Caparrós. El técnico andaluz ha visitado al Atlético seis veces en la Liga con Sevilla y Deportivo y sólo arrancó un empate por cinco derrotas (una de ellas en Segunda). Eso sí, en Copa ganó 1-2 con el Sevilla. Hoy se estrena con el Athletic, cuyo pasado reciente en el Manzanares tampoco es muy alentador. Sólo ha logrado una victoria en sus 17 últimas visitas. Fue el 2 de abril de 2000, en la temporada del descenso atlético, cuando se impuso 1-2 con goles de Etxeberria, Hasselbaink y Julen Guerrero.