Internacional | Argentina
El nuevo San Lorenzo desafía a Boca y River
Placente, D'Alessandro y Abreu, los grandes fichajes
Los años terminados en ocho son sinónimo de buenas cosechas futbolísticas en Argentina. En 1958 ganó Racing con una delantera que se recitaba de memoria (Corbatta, Pizzuti, Manfredini, Sosa y Belén). En el 68 campeonó el Estudiantes de Osvaldo Zubeldia y en el 78, el Independiente de Bochini y Bertoni. En 1988 triunfó el leproso Bielsa con Newell's y en el 98 explotó el Boca Juniors de Bianchi.
Casualmente el favoritismo de Boca descansa en dos discípulos del Virrey: Riquelme y Palermo. Le desafía un necesitado River con Simeone y otro demente del gol, Abreu. Pero la gran amenaza llega de Boedo, donde Ramón Díaz ha configurado un potente San Lorenzo con Placente, D'Alessandro y Berggesio. Sin olvidar a Lanús, que mantiene a Valeri (el Riquelme granate), al atractivo Vélez de Tocalli y a Estudiantes (con tres Verón). Otros, como Racing, se desangran peinando potreros mientras los grandes seducen a pibes desencantados con Europa. No hay plata, pero allí dicen que el fútbol es hijo de la miseria. Arranca el 2008. Prometedora cosecha.