Ni con una suculenta prima. El Cartagena deambula sin rumbo y cada vez más lejos del playoff. Al mismo tiempo, su presidente Paco Gómez va perdiendo la paciencia. Así, el presidente, en el penúltimo intento desesperado por elevar el rendimiento de sus futbolistas, ofreció 9.000 euros al vestuario por vencer al Granada el pasado domingo y acto seguido imponerse al Lorca Deportiva en el derbi. Ni uno ni otro, a la primera, ante el rival en teoría más débil, los de Pichi Lucas no pasaron del empate (y eso que jugaron en superioridad numérica durante media hora).

Paco Gómez estará presente en Lorca, club al que estuvo ligado con una gran inversión, y salvo giro inesperado de última hora no ofrecerá incentivos al grupo sino todo lo contrario. En principio la nómina suele pagarlas el día 10 u 11 de cada mes y si en enero ya retrasó la de diciembre como castigo, en esta ocasión puede ir incluso más allá. Quien sí lo tendrá difícil es el técnico Pichi Lucas, quien sabe que todo lo que no suponga un triunfo en el Artés Carrasco daría con él fuera del banquillo pese a que llegó al club hace escasamente dos meses. El equipo está a cuatro puntos de la promoción y el objetivo, el playoff, está a siete puntos (posiblemente diez si pierde ante un Lorca Deportiva que atraviesa su mejor momento de la temporada).

No se descartan cambios en el equipo del domingo aunque los tres fichajes tienen un puesto asegurado. Arriba, Sivori podría ser titular una vez que Molist ha perdido gran parte de su efectividad goleadora. En el centro del campo sigue sin encontrarse un compañero de garantías para Mariano y en defensa la dupla Orlando-Lusarreta ya no es tan férrea. Urge una revolución.