El tridente contra Tapia

Destaca Antonio Tapia la extraordinaria pegada de este Málaga, del feroz líder. Entre Baha, Salva e Hidalgo llevan 18 goles, seis cada uno. Más Peragón, que persigue al trío del gol con cinco. 23 goles entre cuatro futbolistas. Los mismos que lleva el 74 hasta la fecha. Tapia, que en esto ha aprendido a base de cornadas, le sobra con eso. Sólo los tres primeros clasificados han ganado más partidos que los granadinos. En Segunda hay que ser más efectivo que ostentoso. Aunque para esta jornada le han quitado a su puntal, Aranda. El paleño se queda sin pisar el césped, donde le esperaba toda una cohorte procedente de El Palo para animarle desde la grada. Otra vez será. Eso centra las miradas en Luque, un ex malaguista. Es el brazo ejecutor del entramado estratégico de Tapia. Mucho ojo.

Pero el Málaga aún no ha perdido un punto ante los rivales andaluces. Se mueve bien en los derbis. En realidad, se mueve bien en general. Dio un golpe de autoridad en Carranza. En La Rosaleda está acostumbrado a darlos una y otra vez. No hay más ciencia que la de ganar partidos. Aunque no las tiene todas consigo Muñiz. Ha perdido a Gámez, quizá el hombre más regular del equipo en toda la temporada. Es la oportunidad de Raúl Gaitán, paleño y amigo de la infancia de Aranda. A veces, el fútbol recompensa a gente como Gaitán. Reconforta que la vida premie a los humildes. También andan entre algodones Hélder e Hidalgo. Por si acaso, Muñiz cita a 19 futbolistas.

Este partido encierra algo más que tres puntos. Para ambos. El Málaga asestaría una puñalada a sus perseguidores. 42 puntos en 20 partidos dejaría Primera a escasos peldaños. Con otros 66 puntos por jugarse... Los de Tapia, en caso de triunfo, harían oficial su candidatura al ascenso. El club de Marsá ha ido de tapado todo el año, pero ya es difícil que puedan esconderse. Todo el mundo busca lo mismo.