Ni Pablo García ni Mejía podrán jugar ante su ex equipo

Al Real Madrid no se le aparecerá en la Nueva Condomina ningún viejo conocido en forma de fantasma vengativo. El madridismo no volverá a revivir amargas secuencias del pasado como aquella de Munitis fuera de sí acaudillando al Racing en el Sardinero o esa otra de Morientes goleando para el Mónaco en Champions y tumbando al conjunto blanco.

No habrá ningún ex ávido de revancha y no lo habrá por diferentes motivos. Pablo García no jugará ante su ex equipo por una lesión muscular sufrida durante la reciente concentración de la selección uruguaya que le tendrá fuera de combate un mes. Su baja la acusará en lo futbolístico el equipo grana, pero era algo con lo que ya contaba un Alcaraz al que desde la zona noble de la Nueva Condomina ya se le avisó de que no hiciera planes con Pablo García ni para el partido en Murcia, ni tampoco para la visita a Chamartín. El motivo es de peso: de jugar ante los blancos el Murcia debería abonar al Madrid 600.000 euros.

En el caso de Álvaro Mejía es una sanción por acumulación de amarillas (vio la quinta en Mestalla en la última jornada) la que le impedirá actuar ante su equipo de toda la vida. El central tampoco podrá actuar en la segunda vuelta en Chamartín al quedar estipulado en su traspaso (con opción a compra en las dos primeras campañas) que sólo podía enfrentarse a los blancos lejos del Bernabéu, pero nunca rindiendo visita al coliseo de La Castellana. Al margen de Mejía y Pablo, en el actual Murcia, cosa rara, no hay jugadores con pasado madridista y sí varios 'culés' y un par de ex del Atlético como Movilla y Richi, que le tienen ganas al Madrid.