Kun volvió a marcar de cabeza y ya lleva siete esta campaña

Cuando Agüero se lanzó en plancha para cabecear un centro de Forlán ante la Vojvodina, se consideró algo anecdótico que el pequeño delantero (1,73 oficialmente, aunque hay dudas) marcase por arriba. Un par de meses más tarde ya a nadie le sorprendió que, el sábado, el Kun abriese el marcador del Argentina Bolivia con un cabezazo a bocajarro en el segundo palo. Suponía su séptimo gol con la testa de lo que va de temporada. Una barbaridad.

El mejor de la Liga. El delantero del Atlético es el máximo goleador de cabeza de la Liga con cuatro tantos (Real Madrid, Racing, Sevilla y Villarreal) y a eso suma otros dos en la Copa de la UEFA y el de este fin de semana en la fase de clasificación suramericana para el Mundial.

Lo que es evidente es que su estatura engaña. Porque su repertorio como cabeceador es amplio. En el Bernabéu y ante Bolivia tiró de inteligencia para aparecer por sorpresa en el segundo palo en un córner y ante el Sevilla se aprovechó de un rechace, pero no sólo de picardía vive el Kun. Así, sus goles al Racing y al Villarreal fueron dos cabezazos de libro, girando el cuello y dándole fuerza al balón al más puro estilo ariete clásico. No se trata, por tanto, de un accidente o una buena racha, la conclusión es más sencilla: Agüero es un estupendo cabeceador. Sin más.

Claro, que al argentino en esta campaña le sale todo. Sus números globales son espectaculares con siete goles en la Liga, cinco en la UEFA y otro más con su selección. Trece goles en total, casi doble que en toda la temporada pasado cuando logró siete (seis en Liga y uno en Copa).

Debut como titular y goleador

El partido ante Bolivia supuso el debut de Agüero como titular con Argentina. Éste era uno de los retos que se había marcado el Kun para esta temporada, ya que estaba entrando en las convocatorias pero teniendo pocos minutos. Al fin, Basile se ha rendido a la evidencia y cambió su sistema habitual para dar entrada al atlético y completar una delantera espléndida junto a Messi y Tévez, con Riquelme por detrás. Agüero respondió marcando el 1-0 en el 41', cuando Argentina más atascada estaba. Fue su estreno goleador con la absoluta.