Primera | Levante
Pedro Villarroel ensucia el final de su larga etapa
El dueño, en la recta final si cumple con su promesa de vender
Pedro Villarroel puede estar echando las últimas bocanadas de aire si es que, finalmente, cumple con el propósito de vender sus acciones que trasladó a los consejeros. Si se marcha (que está por ver tras sus numerosos amagos de hacerlo) lo hará después de conseguir algunos logros a nivel deportivo y con luces y sombras en el capítulo social y económico. Lo que queda claro es que no concluirá su larga etapa en olor de multitudes, después de llamar "subnormales" a los aficionados díscolos y tras acusar de "huir como ratas" a los aficionados con motivo del partido de Copa.
En el haber de Villarroel, está el haber devuelto al Levante a la élite tras 40 años. Sin embargo, no supo gestionar ese éxito y, tras fichar a 15 futbolistas e invertir una gran suma de dinero, el equipo está abocado al descenso. Esas ingentes cantidades que ha tirado a la basura en jugadores que, con excepciones, no daban el nivel, han lastrado económicamente al club que, a día de hoy, debe 40 millones.
Uno de los principales motivos por los que el Levante tiene un lastre deportivo y económico es que Villarroel nunca quiso profesionalizar el club. El mandamás se rodea generalmente de colaboradores que no le critican sus errores. Los más válidos terminaron yéndose, como Antonio Blasco o, recientemente, José Nebot.
Lo mejor
Ascensos
Tras cuatro décadas errando por categorías inferiores y varios proyectos fallidos, Pedro Villarroel devolvió al Levante a Primera y bajo su mandato ha estado tres años en la élite.
C. Deportiva
El Levante se ha dotado de una Ciudad Deportiva que, pese a su ubicación a 30 kilómetros de Valencia y al costado de una fábrica de cemento, cuenta con unas buenas infraestructuras.
Recalificación
Aunque Ángel Rubio fue el cerebro de la operación, bajo el mandato de Villarroel se va a conseguir la recalificación de los terrenos del Ciutat, que puede dejar una suma de entre 120 y 150 millones.
Filial-Juvenil
El Levante B se quedó a un sólo punto de ascender a Segunda, algo de lo que pocos clubes pueden presumir. Ahora está en horas bajas. Se ha conformado un buen Juvenil.
Femenino
El Levante Femenino es el orgullo de la entidad azulgrana. Es uno de los conjuntos más laureados de nuestro país y conforma la base de la Selección española.
Lo peor
Derroche
Pese a vender el Terciario por 53 millones, el Levante tiene una deuda de 40 millones y puede ascender a 70 (tras conseguir dos préstamos en un futuro).
Sin proyecto
Villarroel ha fichado a cerca de 250 jugadores y devora entrenadores. En el filial también mantiene esta línea.
Inestabilidad
Nunca ha dado tranquilidad. Como ejemplo, sus últimas declaraciones en que carga contra jugadores, Salvador, afición y ex empleados.
Mala imagen
Exabruptos de Villarroel y sus consejeros, rumores a gritos de compras de partidos, mala relación con los equipos vecinos... La relación con otros clubes, con los árbitros y con los medios de comunicación es bastante mala.
Poco profesional
Es el club menos profesionalizado de Primera y peor que muchos de Segunda. Villarroel lo decide todo y, al querer abarcar mucho, llega a poco. No se rodea de profesionales y, el que vale, se marcha.