Fuertes altercados en Italia por la muerte de un tifoso

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Fuertes altercados en Italia por la muerte de un tifoso

Fuertes altercados en Italia por la muerte de un tifoso

reuters

Partidos suspendidos, asaltos a comisarías, cargas y caos en Roma

La muerte de Gabriele Sandri, un seguidor del Lazio de 26 años de edad, en una gasolinera de Arezzo por el disparo accidental de un policia provocó graves incidentes en los estadios italianos. En Bérgamo, los ultras del Atlalanta forzaron la suspensión del partido contra el Milán cuando ya se llevaban diputados siete minutos. El encuentro que debía disputarse entre el Roma y el Cagliari fue aplazado porque los radicales de signo fascista del Lazio montaron una batalla campal contra los Carabinieri en los alrededores del estadio Olímpico. Los altercados se repitieron hasta en los campos de Tercera. El Taranto-Massese, de la Serie C1, se suspendió en el minuto 58 por graves incidentes del público.

Gabriele Sandri murió de un disparo de pistola en una estación de servicio a las 13:30 horas de ayer cuando se dirigía a Milán en coche a ver a su equipo, el Lazio, frente al Inter. A esa hora, Sandri y los dos amigos que le acompañaban pararon para repostar en Badia al Pino, provincia de Arezzo, en la región de la Toscana. En la gasolinera coincidieron con otros cinco jóvenes, seguidores de la Juventus, que viajaban a Parma para ver a su equipo. Discutieron y la cosa fue a más.

Según las primeras investigaciones, un coche de la Polstrada (Policía de carretera de Italia) con dos inspectores de servicio vieron el incidente desde el otro lado de la calzada. Salieron y uno de ello sacó el arma e hizo dos disparos disuasorios desde lejos con tan mala suerte que una de las balas mató al joven Sandri.

Esa versión, que fue ofrecida por el gobernador de Arezzo, Vincenzo Giacobbe, quien calificó el suceso de "trágico accidente", no fue suficiente porque el abogado de la familia de Sandri, Luigi Conti, dijo tras sus primeras indagaciones que "Gabriele murió en el asiento trasero de su coche de un disparo que entró por la luna trasera y le alcanzó en la parte izquierda del cuello, casi en la nuca. Puede ser un homicidio voluntario". El policía que efectuó los disparos, un agente de 30 años, prestó declaración en la noche de ayer.

La muerte de Gabriele Sandri es la primera que se produce en el Calcio italiano desde que entró en vigor la nueva ley antiviolencia aprobada tras el fallecimiento del carabinieri Filippo Raciti el 2 de febrero pasado, justo antes del derbi Catania-Palermo.