"Venimos de Segunda B, pero no tenemos límite"

¿Se cree dónde está el equipo a estas alturas?

Ya lo dije cuando llegué. Había una gran plantilla y un equipo que, con trabajo y paciencia, podía hacer grandes cosas y mirar a objetivos que no se quedan en la permanencia. No me sorprende la posición en la que está el Córdoba porque los veo cada día entrenarse. Son capaces de esto y de mucho más.

Y eso que, a veces, les ha acompañado la mala suerte

Esto es tan largo que, lo que se te va por un lado, te llega por otro. En una temporada así, todo se compensa.

Le veo muy optimista. Siempre habla de mirar para arriba.

No se puede olvidar de dónde venimos y lo que hemos sufrido con los años que el equipo ha estado en Segunda B. Somos conscientes de ello pero no nos podemos limitar. Nadie debe decirnos que, por haber subido este año, sólo podemos aspirar, por ejemplo, al octavo puesto. Queremos llegar a lo más arriba que podamos, mirando siempre hacia delante y siendo ambiciosos.

¿Qué es lo mejor de este Córdoba?

Además del nivel técnico, me gusta muchos la predisposición que tienen los jugadores a la hora de entrenarse. La actitud es muy positiva y nosotros también tratamos de fomentarla. Tenemos muy buenos profesionales y también muy buenas personas, que eso también es muy importante dentro de un vestuario.

¿Y lo peor?

Tenemos que mejorar muchas cosas, como todos los equipos que quieren aspirar a ser mejores. Debemos limar algunas cosillas. A medida que lo hagamos, seremos un mejor equipo.

¿Cómo se afronta una semana en la que toca el Eibar?

Últimamente vamos rompiendo barreras que no se habían conseguido (risas). Es inevitable que, después de ganar el domingo y de ver la posición en la que está el equipo, haya cierto aire de triunfalismo. Tengo que aislar al equipo de ese ambiente, porque si vamos con aire triunfalista a Ipurúa, difícilmente vamos a sacar algo positivo de allí. Debemos ser muy humildes, aún sabiendo que somos un equipo muy competitivo. Cuando trabajamos duro somos muy difíciles de batir, pero cuando perdamos lo que nos ha hecho estar ahí, seremos un equipo más al que cualquiera le puede ganar. Perderemos partidos porque es algo normal, pero no quiero que sea porque tengamos un triunfalismo que aún es pronto para tener.

De la afición cordobesista, poco más queda que decir

Yo no recuerdo aquí una cosa igual que los diez últimos minutos del otro día contra el Castellón. Se me pusieron los pelos de punta al ver cómo nos animaban. Mucha culpa de ese triunfo la tuvo la afición. Se vio por primera vez una afición inconformista que se rebeló ante lo que nos había pasado últimamente en casa. Cuando tenía el balón el Castellón era un clamor tremendo para que se pusieran nerviosos, y todo lo contrario cuando lo teníamos nosotros. Con una afición así no hay excusas para no sacar adelante los partidos.

Para terminar, baja importante la de Acciari el próximo domingo, ¿no?

Es una ausencia importante pero es una plantilla amplia. Tendrá que entrar otro compañero, pero no está decidido. En ese aspecto estoy tranquilo porque el que entre lo hará perfectamente.