Copa de la UEFA | Erciyesspor 0 - Atlético de Madrid 5
Agüero no baja el ritmo
Hizo dos goles más en la manita del Atleti en Turquía
El Atleti cumplió con nota en su viaje turístico por Turquía: ganó 0-5 dando una imagen notable, conoció la bella ciudad de Kayseri y, sobre todo, volvió a casa sin ningún lesionado. Al fin y al cabo, esa fue la mayor fuente de emoción del choque. Cada vez que un rojiblanco caía al suelo, todo el mundo saltaba de su asiento con la mente puesta en Barcelona. Tal vez esa fuera la intención de Aguirre al poner a sus estrellas en liza: darle un poco de vida al trámite.
De ello también se encargó Agüero, una vez más. El Kun sigue en estado de gracia (y empiezo a sospechar que ése es su estado natural y permanente), así que metió dos goles más como si nada. En el primero regateo a Kaya (un portero ligeramente fondón, todo hay que decirlo) como el que esquiva una farola, sin inmutarse. Y luego marcó otro de cabeza (lleva cuatro así), confirmando que va por arriba como si midiera 15 centímetros más. El tamaño no importa. En su caso.
Sin rival.
Los mejores socios del Kun fueron Luis García, Jurado y el Erciyesspor. Y no en ese orden precisamente. El equipo turco no fue un débil enemigo: fue un amigo. Aún así, como las rotaciones debilitan mucho más la defensa rojiblanca que el ataque, los locales tuvieron varias ocasiones claras, pero lo de apuntar a portería les parecía una odisea. Sólo Ozbay, el único que decidió quedarse tras el descenso, es un futbolista de cierto nivel y su solitaria lucha tuvo algo de heroico. Y mucho de patético. La fidelidad está sobrevalorada, me temo.
Visto lo visto, el Atleti se comportó como un caballero. A medio gas, pero sin parecer que se tomaba a broma el asunto. Respetando sin abusar. Los goles fueron cayendo por su propio peso. Jurado, el atacante que menos oportunidades está teniendo, aprovechó la ocasión. Muy participativo, los huecos que dejaban los turcos, a él le parecían enormes socavones. La calidad está ahí, veremos si logra mezclarla con fiabilidad.
Justo lo que le sobra a Luis García, que cada vez que juega presenta avales tangibles. Fabricó dos goles, provocó un penalti y rozó su propio tanto en varias ocasiones. De los cuatro jugadores de banda que alterna Aguirre es el que menos minutos ha tenido en los partidos serios, pero su rendimiento exige más oportunidades. Es demasiado futbolista para limitarle a compromisos menores.
Tras el descanso, Maxi metió un penalti que debe relanzar su confianza y Forlán entró por Agüero, ya con la tranquilidad de saber que los turcos no pegaban ni una patada. Ya que estaba, el uruguayo marcó su golito para recordarle al Barça que de pólvora andan ambos sobrados. El Atleti llegará al Camp Nou con cinco victorias seguidas por un global de 17-0. Y con el Kun. Hay partido.