Primera | Real Madrid
Schuster instaló ayer las jornadas de convivencia
La plantilla comió junta por primera vez tras entrenarse
El Real Madrid ha cambiado su rumbo respecto a la temporada anterior. Y no sólo con el juego más atractivo que despliega ahora sobre el terreno de juego. Schuster lleva cuidando el más mínimo detalle desde que se hizo cargo de la plantilla y ayer volvió a dar un paso más a la hora de ejecutar los nuevos planes de convivencia que quiere instaurar en el equipo: el técnico alemán organizó un almuerzo tras el entrenamiento con el objetivo de que el trabajo colectivo no se agote sobre el césped. Su idea es que éste se extienda cuantitativamente y se creen reuniones para complementar la jornada laboral.
Para Schuster, lo ideal es que los jugadores permanezcan unidos alrededor de seis horas al día, desde que llegan hasta que se van de Valdebebas, y quiere que estas reuniones sean habituales a partir de ahora. Con la innovadora medida de ayer, muy usual en Italia o Inglaterra, Bernd da un paso al frente en la profesionalización que el cuerpo técnico y la directiva desean realizar.
De esta forma, y con la ausencia de los 16 internacionales de la plantilla que se marcharon con sus selecciones, los capitanes Raúl, Guti y Salgado, más Dudek, Codina, Pepe, Soldado, Robben, Diarra, Higuaín, Torres y Marcelo, pasaron más tiempo del habitual con la mente puesta en los entrenamientos y los aspectos futbolísticos. Todo con una alimentación más cuidada. A la comida también se unió el cuerpo técnico, los médicos y los utilleros del equipo.
El almuerzo de ayer viene a confirmar las buenas intenciones mostradas el pasado 23 de agosto, cuando el equipo cenó junto en Valdebebas por expreso deseo de Ramón Calderón. Aquel envite, como este último, se desarrolló en una única mesa, acabando así con los grupitos de antaño.
Con esta jornada de convivencia, Schuster sigue avanzando con su política de renovación. Antes, ya obligó a los jugadores a pernoctar por parejas en los hoteles donde se hospedaron y no en solitario, como con Capello. También eliminó las concentraciones previas a los partidos en casa.
Todas estas decisiones han sido muy bien acatadas por la plantilla al entender que su repercusión será muy favorable para los intereses del equipo.