Iraizoz llega ya y Lafuente promete volver en un año

Gorka Iraizoz ya piensa en rojiblanco. El portero navarro será presentado al mediodía de hoy como nuevo jugador del Athletic. No será en Papendal, donde los rojiblancos continúan con su stage de concentración, y sí en San Mamés. El ex portero de Eibar y Espanyol, el equipo con el que el pasado sábado jugó su último partido (acabó con una ligera contractura cervical después de medirse al Derby County), regresa a Bilbao con un contrato por cuatro temporadas y como protagonista de una operación en la que el club de Ibaigane desembolsa 4,6 millones de pesetas y cede a Iñaki Lafuente por un año al Espanyol. Igual que Aitor Ocio (tres millones de euros al Sevilla), Iraizoz también perteneció al Athletic, aunque en su caso nunca llegó a debutar en el primer equipo. Ni siquiera tuvo sitio en el filial.

El acuerdo se consumó alrededor de las 22:30 horas del lunes cuando Iñaki Lafuente dio el OK. Para el de Retuerto no fue fácil tomar la decisión. No salió a entrenar por la tarde porque su teléfono echaba humo. Primero le llamaron desde la secretaría técnica del Espanyol. Después fue el propio Ernesto Valverde el que telefoneó al guardameta.

Lafuente, que esperó acontecimientos en la sala de masajes mientras que el resto de los jugadores rojiblancos se ejercitaba en el exterior, aceptó recalar en el Espanyol con la idea de regresar en junio a cumplir los dos años de contrato que aún posee. Ayer viajó a Bilbao para cerrar las condiciones de su cesión. El representante del futbolista hizo lo propio con la directiva españolista.

El club catalán le ha dado 24 horas de libertad antes de incorporarse a la concentración que los de Valverde realizarán desde mañana en Holanda.

Lafuente se va convencido de que su sitio está en Bilbao y quiere aprovechar la cesión al Espanyol para demostrar que es un portero de garantías. La confianza que tiene Valverde en él es un aval de importancia y peleará con Kameni por ser titular en Montjuïc. Además aprovechará seguro los compromisos internacionales del camerunés, por ejemplo la fase final de la Copa de Africa en invierno.

Comprometido. El portero ha vuelto a demostrar su compromiso con el Athletic. Salir de Bilbao no entraba en sus planes (tiene un hijo de corta edad) y estaba dispuesto a convencer a Caparrós. Pero también sabía que si decía que no complicaría la llegada de Iraizoz, fichaje que prometió la directiva en campaña y por el que suspiraba Caparrós.

Hombre de club hasta el tuétano se va apenado aunque con billete de vuelta. "Es un momento difícil, pero había que tomar una decisión. Espero que esto sea bueno para todos: para mí, para el Athletic y para el Espanyol. Es una cesión que quiero aprovechar porque el año que viene confío seguir dando guerra en el Athletic".

En Barcelona le espera Mari Lacruz, con quien ha coincidido casi toda su carrera en Bilbao, y, sobre todo, con Valverde, clave en la operación: "Ernesto ha tenido muchísimo que ve en que tomase esta decisión. Ha apostado por mí y teniendo en cuenta como estaba todo está claro que me ha hecho dar el último paso".