Primera | Real Madrid
Ballack, Robben y Drenthe en menos de 48 horas
Ramón Calderón regresa hoy a su despacho del Bernabéu para cerrar los fichajes que prometió a Schuster. El presidente quiere que los tres refuerzos puedan disputar la Supercopa ante el Sevilla. Los jugadores del Chelsea y la perla del Feyenoord ya han dado el sí al Madrid.
Ramón Calderón regresa hoy a su despacho del Bernabéu tras gozar de unos días de descanso en Biarritz y lo hace con un objetivo prioritario: cerrar los fichajes de Ballack, Robben y Drenthe antes de 48 horas. El presidente del Madrid quiere poner a disposición de Schuster al triple refuerzo prometido para que estén presentes en la Supercopa ante el Sevilla, que comenzará a disputarse este sábado.
El Madrid ya tiene el visto bueno de los tres jugadores que, por otra parte, ya le han hecho saber a sus respectivos clubes su intención de vestir de blanco la próxima temporada. Sin embargo, los dirigentes madridistas todavía deben acordar el precio final de los traspasos con los presidentes de Chelsea y Feyenoord.
Cumbre.
Hoy por la mañana se espera mucho ajetreo en las oficinas de Concha Espina. Ramón Calderón, Pedja Mijatovic y el director general del club, José Ángel Sánchez, se reunirán para continuar con las llamadas y cruces de faxes.
La prioridad para ellos es la llegada de los dos cracks del Chelsea, Ballack y Robben. El acuerdo conjunto comenzó a cerrarse en torno a los 40 millones de euros, pero finalmente se tasará alrededor de los 42 ya que Abramovich quiere sacar todo el dinero posible para intentar cerrar el fichaje del sevillista Alves.
La buena noticia para el Madrid es que Ballack ha aceptado rebajar a la mitad los ocho millones de euros netos anuales que cobra en el Chelsea y firmará un contrato por tres campañas. Tanta es la inmediatez del acuerdo, que el representante del alemán, Michael Becker, puso fin a sus vacaciones en el Algarve (Portugal) antes de tiempo y regresó urgentemente a Londres para finiquitar la salida del jugador.
Defenestrados.
Ballack no jugó ayer la final de la Charity ante el United porque sigue tocado de su tobillo izquierdo (operado dos veces). Por este motivo y por su edad (cumplirá 31 años), Abramovich ve rentable su marcha por primera vez. El motivo es claro: se ahorrará los 16 millones de euros que debía cobrar hasta la finalización de su contrato (2009) y, además, sacará tajada tras no haber pagado ni un euro por él al Bayern en 2006.
Robben tampoco jugó ayer, pero éste no lo hizo por otro motivo. Mourinho citó al extremo después de no haber contado con él en los últimos cuatro amistosos de pretemporada, pero luego tuvo que hacer un descarte previo al partido y él fue el elegido. Toda una declaración de intenciones. Robben vio la derrota de su equipo desde la grada sin el mínimo gesto de preocupación. Quizás su cabeza ya esté en Madrid.
El Feyenoord acepta cobrar a plazos
El Madrid vuelve a la carga para fichar a Drenthe, que ayer marcó un gol y provocó un penalti ante el Liverpool. Tras un amago de renuncia debido los 18 millones de euros al contado que pedía el Feyenoord, el club blanco ha vuelto a negociar con el mánager holandés, Peter Bosz. El Madrid propone pagar el traspaso en tres plazos y el club de Rotterdam ha acercado posturas ante el deseo de Drenthe de vestir de blanco.