Primera | Zaragoza
Las escopetas apuntan ahora a Los Pajaritos
El poderoso Zaragoza se prueba en Soria. Debutará López Vallejo
El Zaragoza avanza en su calendario veraniego estilo NBA y esta tarde disputa su cuarto amistoso de la pretemporada: contra el Numancia, en el estadio de Los Pajaritos, a las 20:30 y televisado en directo por Aragón Televisión. Las previas y las crónicas al sol se suceden. Cualquier reflexión debe cocinarse a fuego rápido, abrasador. Ni un minuto a la sombra. Que el ritmo no pare: canción caducada, lema moderno.
La escuadra de La Pinilla aún se recupera del obús inmejorable de Generelo, su banda derecha sigue fatigada por el ilusionante despliegue de Valero, todavía pueden escucharse los lamentos del creciente Esaú o las exclamaciones por el fútbol lujoso e intencionado de Matu y D'Alessandro. Nada ha perdido color en la memoria; parece que fue ayer... Fue anteayer. Y hoy nueva historia o nuevo rodaje en busca de esa ilusión que es la versión perfecta, imbatible.
Matu.
Víctor alternará hombres y sistemas. Un partido, un columpio. Doble pivote y rombo; jugarán más los que menos minutos acumularon contra el Villarreal e irá asomando el resto. Vuelve Celades, recuperado de una leve sinovitis, y es seria duda Chus Herrero, lastimado en su muslo izquierdo por un golpe en el duelo anterior.
Las conclusiones se memorizan o se apuntan, pero se toman. La velocidad de la noria no impide apreciar un centro del campo mucho mejor cosido, con una mayor expresividad. Va y vuelve, juega y mete, toca y se mueve, pierde y recupera, pasa o dispara. En la segunda parte contra el Villarreal, ¡contra el Villarreal de Pires, Cani y Cazorla!, se recuperarían pocos balones menos que durante toda la segunda vuelta de la pasada temporada...
Ahí, en el medio, se agiganta la figura de Matuzalem. En su caso, sólo se contrae el nombre. Matu ha dejado Ucrania para liderar la revolución ideológica del conjunto aragonés. Es la puerta que abre la jugada y la ventana que observa el panorama. Todo en uno. Jugador Ikea. Se descuelga siempre para recibir de los centrales y cerrar así una herida que sangró todo el año. Mezcla sus decisiones,:calma y agita. Su rostro es un calco del de Nayim, a Láinez le recuerda al criterio de Aragón... Bastaría para conmoverse, pero tiene más: un motor irrompible.
El partido servirá para que el Numancia de Arconada se presente ante su afición y para que López Vallejo se estrene. La llegada de Aimar y su presencia en la grada hizo invisible el duelo del verano pasado, ahora sólo apetece mirar al césped. Cada dos o cada día.