Marsá: fin de la huelga y traslado hasta Motril

El Granada 74 al final jugará en Motril. A las tres de la tarde de ayer, Carlos Marsá, presidente del club, daba por terminada la huelga de hambre que llevaba a cabo desde el miércoles y aceptaba la propuesta de la localidad motrileña para ser la sede del ya conocido como 'equipo errante'. Concretamente el estadio Escribano Castilla, donde los técnicos de la LFP hicieron un examen el pasado martes para asegurar que el campo cumplía las condiciones para acoger encuentros de Segunda.

Después de que en la mañana de ayer el Ayuntamiento le negase oficialmente a Marsá la posibilidad de jugar en el estadio de Los Cármenes, el presidente vio que su medida de presión no iba a ningún lado y la abandonó. De todas formas, el dirigente afirmó no darse por vencido y predijo que "esto no se va a quedar aquí" por lo que se esperan nuevas iniciativas por parte de Marsá que quizá recurrirá en los juzgados la decisión del Ayuntamiento.

Pero los problemas del '74' no terminan aquí. Tras hacerse oficial la operación que llevó a cabo Marsá para comprar la plaza del Ciudad de Murcia, la Federación ya anunció que se oponía a que el equipo abandonara la ciudad a la que pertenecía. Sobre esto también se refirió Marsá: "La Federación no puede prohibirlo, sino sólo oponerse ya que lo que ha habido es una venta de acciones".

El Ayuntamiento no cedió

A pesar de que ya se conocía anteriormente la postura del Ayuntamiento sobre el uso de Los Cármenes por el Granada 74, fue ayer cuando se hizo oficial la decisión. La moción presentada por el Grupo Socialista e IU fue denegada, por lo que el único recurso para los de Marsá sería el judicial. Juan Casas, concejal de Deportes, basó la negativa en que "los informes técnicos que hay desaconsejan que puedan jugar tres equipos en Los Cármenes". Actualmente ya juegan el Granada Club de Fútbol (2ªB) y el Granada Atlético (3ª).