"El Hércules es una parte importante de la ciudad"

sted llega para cubrir uno de los puntos flacos en el organigrama del Hércules, en los últimos tiempos. ¿Cómo se producen los contactos y cuándo se decidió a aceptar el proyecto del Hércules?

Primeramente me habló de ello Juan José Huerga, aunque al final quien me lo propuso fue Enrique Ortiz. Yo acepté enseguida teniendo claro desde el primer momento qué papel iba a desempeñar.

¿Qué supone para un alicantino siempre muy inmerso en el deporte de la ciudad, entrar a formar parte de la nave herculana?

Trabajar para el Hércules es trabajar para una parte de la ciudad. El Hércules es una de las cosas más importantes de esta ciudad. Al margen de esto, sé que vengo a una sociedad anónima, en este caso deportiva, que tiene unos objetivos económicos y deportivos que cumplir. Mi trabajo será mantener las relaciones externas y obtener los recursos económicos para cimentar este proyecto que se llama Hércules Club de Fútbol. Es para mí un reto muy importante. Tengo que agradecer profundamente la confianza que los tres accionistas del club, Enrique Ortiz, Valentín Botella y Juan José Huerga, han depositado en mí. Espero responderles con trabajo y dedicación y también deseo que Blas Bernal no genere noticias sino que sea el Hércules quien las acapare con sus éxitos deportivos.

¿Qué meta se marca para esta temporada en cuanto a recursos económicos a generar?

No me marco ninguna meta. Ahora mismo estoy estudiando toda la documentación. Acabo de aterrizar y aún desconozco cómo se encuentra internamente el club. La entidad se ha marcado una meta ambiciosa, que es luchar para intentar el ascenso. Por tanto, el objetivo económico tiene que ser también ambicioso y tenemos que apostar clara y decididamente. No obstante, sería incapaz de cuantificar qué cantidad debemos recoger el primer año aunque sí tenemos un reto importante: elevar el listón.

¿Qué modelo va a seguir para continuar con la profesionalización del club?

Tengo claro que tenemos que vender sentimiento y la marca Hércules, que es más relevante de lo que nos podemos imaginar. Tenemos que tenerlo claro. También será importante que el Hércules se abra a los municipios colindantes y, si me apura, a toda la Comunidad. No veo por qué no podemos abrirnos a toda la región.

El Hércules ya tiene un director general, a nivel interno, que es Vicente Ferrándiz. ¿Qué parcela es la que viene usted a cubrir?

Ya lo comenté antes. Allá donde el club lo considere oportuno allí estaré para representarlo. También buscaré recursos externos tanto del sector privado como del público, que es un sector que conozco bien.

¿Qué tiene en mente acerca del desarrollo de la marca Hércules?

Hay una idea de club. La marca se ha estado vendiendo durante toda la vida. Se trata de profundizar en el desarrollo de esa marca y hacerla apetecible. Hay que vender el objetivo deportivo, que es intentar subir a Primera, y conseguir el refuerzo económico que necesita el Hércules para lograrlo. Yo no vengo con una chistera de la que voy a sacar conejos, sino con trabajo y dedicación.

¿Deja atrás, de algún modo, el ámbito político?

Las ideas políticas forman parte de la privacidad y de los sentimientos íntimos de cada uno. Yo, en un momento dado, lo saqué a la calle. Y ahora, vuelve a ser un sentimiento íntimo para mí.

¿Se ha fijado en algún equipo para trabajar?

El Hércules tiene que tener su propia personalidad aunque cogeremos casos de equipos que hayan funcionado bien y desterraremos lo que haya funcionado mal. Hoy en día, todo está inventado pero cada uno tiene que tener personalidad.