Touré, que se quedó sin cabeza, será presentado hoy

Yaya Touré hace un par de días que pasea por Barcelona. Ayer dio el OK a la oferta y será presentado este mediodía (13:00). Seguramente no reunirá a los 30.000 hinchas que aclamaron ayer a Thierry Henry, pero Joan Laporta volverá a arreglarse para explicar el potencial del centrocampista de Costa de Marfil. Procedente del Mónaco, es de esos tipos que rascan en la zona ancha y que tiene una zancada que dejará impresionado a más de algún amante del músculo.

Touré es un hombre sin cabeza. Siendo jugador del Olympiacos griego, el marfileño decidió dejar Atenas para marchar al Principado de Mónaco. Lo hizo de un día para otro y casi sin dar explicaciones. Eso molestó tanto a los dirigentes griegos, que decidieron que en la sala de prensa y en los videomarcadores del Olímpico ateniense, de Touré sólo se viera el cuerpo. Lo decapitaron por su actitud y por dejar plantados a sus hinchas, cuando era considerado un ídolo.

Touré hace tiempo que reza. Espera que el sorteo de la Champions League no lo lleve de nuevo a Atenas. Allí, su cabeza no está, pero tiene precio.