El vestuario del Castilla echa humo

Ayer llegó a mis oídos que el vestuario del Castilla está indignado. Iluso de mí, no le di importancia al entender (o desear) que sería por la lógica amargura de haber descendido y tener que viajar a Cádiz, la cuna del carnaval, en pleno velatorio. Pero no. El mosqueo es por un tema banal: las vacaciones. A pesar de que hoy concluye la Liga para todos, y las carreras en el Madrid para muchos, Michel ha citado el próximo jueves a los jugadores para descifrarles su futuro. Por este motivo surgieron las malas caras y sus peores actitudes. Por un lado, los canteranos han olvidado que cobran hasta el 30 de junio alegando que muchos, como Negredo, ya tenían billete para viajar y deberán cancelarlo. Una justificación que en boca de sus novias es entendible, pero en las suyas resulta sonrojante tras este fiasco de campaña.

Michel también se equivoca. La reunión no tiene mucho sentido ya que los seis Sub-20 se ausentarán salvo sorpresa de este acto de clausura y de los restantes; cinco ya saben que no continuarán. Las explicaciones del técnico serán ante un auditorio reducido pero, ya puestos, su discurso podría comenzar por explicar por qué el Castilla sólo tendrá hoy 16 jugadores en el Carranza y no 18, como concede el reglamento. Mientras, Santacruz esperará en la capital (recuperado de su lesión a pesar de lo que reza la web blanca) a que el jueves le den un diploma y un adiós...