Christian Benítez, el hijo de La Pantera y el punta del futuro

Emen Benítez fue uno de los más grandes delanteros en la historia del fútbol ecuatoriano. Idolo de masas en El Nacional de Quito a mediados de los ochenta, le llamaban 'La Pantera' y, con sus goles, el equipo militar ganó tres ligas seguidas: 1982, 1983 y 1984. Máximo goleador en la historia de El Nacional, marcó una época y pasó a la leyenda como el primer futbolista ecuatoriano en emigrar a Europa cuando fichó por el Jerez en 1986, el año en el que nació su hijo Christian.

Hoy, aquel crío que creció admirando a su padre, se ha convertido en uno de los más prometedores delanteros de Suramérica, fue incluso convocado al Mundial y podría compartir durante muchos años delantera con Felipe Caicedo. Benítez también golea en El Nacional de Quito, por supuesto. No le gusta que le llamen 'La Panterita' en alusión a su padre" y sí 'Chucho'. Rápido y potente, da la sensación de rendir mejor como segundo delantero y, tras su excelente temporada pasada con 16 goles incluidos, sonó para el Villarreal. Hábil con el balón, el golazo que le marcó a Perú en un amistoso en EEUU deja claro su nivel. Velocidad en los últimos metros y disparo certero. Por eso ascendió rápido en la escuela de El Nacional desde que le llevó con nueve años Osvaldo Narváez, el técnico que lo intuyó todo. Luego vino el debut con Ever Almeida como entrenador, sus primeros pasos en la selección sub-17 y la sub-20 y por fin la absoluta. Fue la gran sorpresa de la lista de Luis Suárez para el Mundial. Le vimos unos minutos ante Alemania, y a partir de ahí, a trabajar. De momento no optará a superar el récord de 191 goles de su padre porque ya estudia su marcha a Europa, al Dinamo de Moscú. Los ecuatorianos se terminarán rindiendo ante él y su pareja de ataque Felipe Caicedo.