Primera | Real Madrid
"La llama de Juanito sigue todavía viva"
Fuengirola, localidad natal de Juanito, no olvida a su hijo predilecto. 15 años después de su triste adiós, toda su gente quiso rendirle pleitesía una vez más. Como si fuese el minuto siete de un partido cualquiera en el Bernabéu, su pueblo entero gritó: "¡Illa, illa, illa, Juanito maravilla!".
La llama de Juanito sigue viva". Juan Gómez Juanito, símbolo del madridismo 15 años después de su trágico fallecimiento, perdura en la memoria y el corazón del pueblo que le vio nacer. Fuengirola y AS rindieron su particular tributo al genio en el abarrotado Palacio de la Paz, a pocos metros del pabellón deportivo que lleva el nombre de Juan Gómez. Moderada por Pedro Pablo San Martín, una charla de lujo con Vicente del Bosque, Manolo Velázquez, Manu Sánchez, Fernando Sanz y Tomás Roncero, que arrancó la primera gran ovación del público: "Para mí no ha muerto. Ni va a morir".
Del Bosque, íntimo de Juanito, abrió fuego: "El mío es el testimonio de un amigo, vivimos momentos muy emocionantes. Juan tenía criterio, opinión Era sincero y directo y eso le perjudicaba. Juanito hubiera sido entrenador del Real Madrid, casi seguro. Le adornaban muchas cualidades para serlo". Tras el ex técnico madridista, Velázquez, otra leyenda blanca, recordó una anécdota con el padre de Juanito, que se le presentó una mañana en el viejo mercado de Fuengirola: "Yo estaba con mi madre y un señor me dijo: 'Soy Gómez y mi hijo juega al fútbol, me gustaría saber su opinión acerca de él'. Juanito siempre tuvo algo especial, no era estándar. Ahí está la huella que ha dejado, que se nota en la piel cuando se corea su nombre en el minuto siete de cada encuentro".
"Juanito no habrá más que uno", sentenció Manu, jugador del Málaga e íntimo de la familia Gómez. A su derecha, Fernando Sanz, su presidente: "Entré en la cantera del Madrid en el 82 y ver a Juanito en la Ciudad Deportiva era como ver a un Dios. Cuando se murió, sentí que se moría un familiar". Y todo el pueblo hizo un silencio cuando habló José, el hermano de Juanito. "Gracias al Ayuntamiento, al AS, a la mesa... Son 15 años y aún no tenemos palabras para decir lo que significa Juan", dijo emocionado. Y como no podía ser de otra manera, el auditorio cerró el homenaje a su ídolo con el cántico entre los cánticos: "¡Illa, illa, illa, Juanito maravilla!".