Estuvo dos días en la cárcel y le vetó Bernabéu

Primera | Campanal II

Estuvo dos días en la cárcel y le vetó Bernabéu

Estuvo dos días en la cárcel y le vetó Bernabéu

Pero se defiende: "Yo era noble"

Han pasado ya casi 50 años, pero Raymond Kopa sigue estremeciéndose con sólo escuchar su apellido. "¿Campanal?, Catastrof, catastrof", balbucea el Balón de Oro madridista. Kopa fue uno de los protagonistas de aquel 8-0 con el que el Sevilla salió escaldado de Chamartín en octavos de Copa de Europa de 1958, partido que marcó, en la segunda parte, una tángana monumental con dos actores principales: Marsal... y Marcelo Campanal. Así lo cuenta el ex sevillista: "Marsal salió a provocarme. Y lo peor fue que me escupió. Por eso le pegué un puñetazo. Luego, comprendo que nos expulsara el árbitro".

El episodio es sólo una pequeña parte de la archiextendida fama de "duro" que acompañó al zaguero durante la mayor parte de su carrera. Sobrino de otro sevillista insigne, Guillermo Campanal, ariete en la célebre delantera Stuka, Marcelo (Campanal II) pasó a la historia de Nervión jugando en las antípodas, como central inabordable y sin complejos. Él reniega de esa fama: "Era expeditivo, pero noble. ¡Sólo hice dos penaltis en mi carrera, y los dos fuera de casa". Contradicción: luego, Campanal alimenta la leyenda con nuevas y estrambóticas anécdotas.

Habla el asturiano de lo que en la época se denominó 'la batalla de Oporto'. Un ¿amistoso? que acabó con el central y con Romero, otro sevillista, en una comisaría de la ciudad lusa: "Todo comenzó cuando un portugués le rompió la nariz a Romero. Me fui a por él y le tumbé. Luego, todo el Oporto se lió conmigo a porrazos mientras me defendía con un banderín de córner. Me salvó de la muerte la Policía, pero me metieron en la cárcel dos días. Intervino la diplomacia española para sacarme".

No se vayan todavía, que aún hay más: "Quizá sea el único futbolista que ha pasado tanto tiempo en la cárcel por una tángana. Pero también el único a quien vetó un presidente de fútbol. Fue contra el Madrid, en una final del Carranza, uno de los partidos más duros que he visto en mi vida. En el descanso, Santiago Bernabéu le dijo a Ramón de Carranza (entonces mandatario del Cádiz) que si yo salía al campo en el segundo tiempo el Madrid no seguían jugando. Y me quedé fuera".

Por encima de su dureza, Campanal engrosó la historia del fútbol español como uno de los mejores centrales que ha tenido la Liga, con 16 temporadas como jugador del Sevilla y 11 partidos con la Selección española, de la que llegó a ser capitán con sólo 23 años. En 1954, además, logró el galardón de mejor deportista hispano del año por delante de otros futbolistas de la talla de Zarra o Kubala. Un mito muy viviente.