Aimar se relame: "Veo el palmarés y es un orgullo"

Con el gesto serio, de impoluto traje oscuro a rayas y melena meticulosamente cuidada al viento, Pablo Aimar recibió ayer en Madrid el premio EFE al Mejor Jugador Iberoamericano de la temporada 2005-06. Un galardón que ya obtuvieron en el pasado grandes estrellas de la Liga como Ronaldinho, Ronaldo, Redondo o Rivaldo y que en esta ocasión fue a parar a las manos del genial jugador del Zaragoza, aunque, eso sí, por los méritos hechos en su última temporada en el Valencia. Al acto acudieron numerosas personalidades del mundo del fútbol, entre ellas el seleccionador, Luis Aragonés, el presidente de la Federación, Ángel María Villar, el presidente de la Liga, José Luis Astiazarán, o el secretario de Estado para el deporte, Jaime Lissavetzky.

"Quiero agradecer a quienes pensaron en mí. Espero que este no sea el último premio que me dan", se limitó a declarar el argentino en el estrado, justo después de recibir el trofeo. A continuación, lejos ya de los focos principales, Aimar profundizó más en lo que supone este premio para él. "Estoy orgulloso, sobre todo tras ver la lista de jugadores que han logrado el galardón antes que yo. Ahora sé que quien gane la próxima edición verá mi nombre inscrito en él. Han puesto, además, un vídeo con mis mejores jugadas en España, pero está claro que sólo ponen los buenos momentos que he tenido en la Liga, no los malos", se permitió incluso bromear. Tampoco olvidó analizar el mediapunta zaragocista el importante envite que su equipo tendrá que afrontar el sábado ante el Villarreal. Un duelo que casi con seguridad se perderá a causa de su esguince de rodilla, pero que será importante para dejar descolgado a un rival peligroso que ya no contará más con su amigo Riquelme durante esta campaña: "He hablado con él, sí, pero no de las razones de su marcha. Simplemente regresa al lugar en el que es feliz. Es evidente que para nosotros es mejor que no esté. En cuanto a mí, no creo que pueda jugar y, la verdad, prefi ero no arriesgar. La temporada está siendo linda, pero la derrota en Mallorca el fin de semana no entraba en los planes y ahora toca enmendarla". Objetivos. Una vez pasado el ecuador de la temporada, los objetivos del Zaragoza para esta campaña se ven con mayor nitidez. Aimar lo sabe, por lo que no duda en ponerse metas bastante altas: "Hay que superar la clasifi cación alcanzada el año pasado y después lo que tenga que ser, será. Está claro que la Liga la van a disputar los que se dijo a principio de temporada que estarían ahí, pero nosotros no tenemos que conformarnos con quedarnos donde estamos. Tenemos que mejorar todo lo que podamos en la tabla".

Aparte de ambición, el mediapunta evidenció buenas dotes de humildad, lo que le hacen más grande aún. "Ni en los malos momentos hay que ponerse en la vía del tren ni en los buenos, como éste, lo contrario. Es necesario entender las cosas. Mi equipo ha ganado partidos sin mí y hemos perdido conmigo, por lo que no me considero imprescindible".