Agüero busca revancha

Hoy Agüero será titular. Parece. Porque Aguirre no dio ayer lista de convocados y jugó al despiste con su once, pero el mexicano es un tipo inteligente y el instinto de supervivencia le dicta que si se le ocurre volver a dejar al Kun en el banquillo y Osasuna moja de nuevo, se le vendrá encima la madre de todas las tormentas. Así que Agüero al campo junto a Torres. Aferrado a esa pareja (y a Luccin) vive y crece el Atlético, que si gana se acostará con los mismos puntos que Barça y Madrid. No está nada mal entre tanto tumbo.

Pero al Calderón, albergue amable para visitantes, llega Osasuna. Tembleque y pelos como escarpias. Si los Lakers tenían a los Celtics, Luke Skywalker a Darth Vader y la Patrulla X a Magneto, el Atleti tiene ahora a Osasuna. Su archienemigo, una extraña relación que mezcla de conocimiento extremo, odio y respeto. Heridas abiertas, venganzas pendientes, tensión máxima y planes secretos para cada nuevo encuentro. Y al final generalmente ganan los navarros, más por costumbre que por otra cosa. Las tradiciones, ya saben.

Nueva ola.

Pero el Atleti puede aferrarse a la bendita inconsciencia de Agüero, que no entiende de miedos ni de traumas. Además, Ziganda cambiará toda la defensa respecto al partido de Copa y no imponen lo mismo Cuéllar y Miguel Flaño que Cruchaga y Josetxo, que arrastra un pique casi ancestral con Torres, al que hostiga sin descanso ni medida. Por contra, el Niño le tiene tomada la medida a Cuéllar, al que expulsó dos veces en cuatro días hace un par de años.

Osasuna también cambia el sistema a un 4-1-4-1 con Webó (otro que castiga con frecuencia al Atleti) como único punta. Por detrás una línea de cuatro jugones (Juanfran, Raúl García, Font y Valdo) que pueden hacer sangre de la habitual falta de pericia con el balón de los rojiblancos. Ah, y de ancla, Nekounam, el único inamovible. Y con razón. Empezó llamando la atención por exótico y ahora casi ni se recuerda que es iraní, sólo que es muy bueno. Por fortuna para el Atleti, descansa Puñal. Y vuelve el Kun, lo que rescata a Torres y augura espectáculo. Si no hay sorpresas, claro.

Ziganda celebra sus 400 partidos en Primera

Cuco Ziganda (1-10-1966) alcanzará esta tarde en el Calderón los 400 partidos en Primera, sumando los que disputó como jugador (381) y los 19 que sumará ya como entrenador de Osasuna. Como futbolista, el delantero navarro jugó 126 encuentros con su actual equipo y 255 con el Athletic. Debutó el 13 de diciembre de 1987 en un Osasuna-Sabadell (0-0) y se retiró tras un Villarreal-Osasuna (2-0) el 27 de mayo de 2005. En total, marcó 111 goles en la máxima categoría. Como entrenador, Ziganda está continuando una tradición que implantó en Osasuna su hoy rival Javier Aguirre. El conjunto rojillo acumulará esta tarde 77 jornadas de Liga seguidas sin repetir una alineación, 58 con el mexicano y 19 con el navarro.-Pedro Martín