Copa del Rey | Atlético de Madrid - Osasuna
La Copa contra la resaca
El mal del Calderón marca la reunión Aguirre-Osasuna síndrome del Calderón
Hay veces en que la repetición muy seguida de un error lo soluciona. Tomarse una cerveza nada más despertar para aminorar la resaca, comenzar una relación absurda para olvidar que acabas de cortar otra o jugar un partido en casa pocas horas después de hacer el ridículo en otro. A eso se aferrará el Atlético esta noche tras su fiasco ante el Nàstic, obligado a encarrilar la eliminatoria ante Osasuna para hacer olvidar que el Calderón parece una casa de acogida.
Si no fuera por los síndromes que persiguen a este Atleti más neurótico que Woody Allen, el foco estaría sobre el reencuentro de Osasuna y Aguirre, una gran historia de amor de la que todos salieron mejorados y acabó entre sonrisas. Ciencia ficción que hoy se enfrenta a la realidad. Ya saben: dos besos, que alegría verte, te veo más rellenita, yo a ti la frente más despejada y en cuanto te des la vuelta te acuchillo.
Dos estilos.
Porque Ziganda disfrazará a su equipo con una piel de cordero, pero será un lobo. Osasuna renunciará a un delantero y alineará un trivote. Así dicho suena a rendición, pero hay truco, ya que el trío Nekounam-Font-Raúl García no tiene ni un picapedrero. Mucho toque contra un Atlético que se marea con facilidad si la pelota da muchas vueltas. Él es más de líneas rectas: patapum y a rezar que le caiga a alguno de los talentos que acumula arriba con Torres, Agüero, Jurado y Mista. Sólo Luccin pone algo de pausa y casi nunca le dejan.
En fin, la clave será lo que les decía al principio de la repetición de errores. Es un tema confuso, porque a menudo la birra matinal acaba en otra borrachera, la segunda relación en un infierno, el reencuentro con tu afición en bronca e intentar elaborar una nueva teoría sobre el Atleti en ridículo.
El Atleti sigue en cuadro y sin convocatoria
La plaga de lesiones está poniendo al Atlético en una situación casi desesperada. Su plantilla siempre fue corta (21 jugadores, pero con tres porteros), luego cayeron de gravedad Miguel de las Cuevas, Maxi y Petrov y, ahora, se suceden los incidentes. Tanto es así, que Aguirre no pudo dar ayer la lista de convocados y ha programado un entrenamiento para hoy por la mañana en el que se someterán a pruebas físicas Perea, Costinha, Seitaridis y Galletti. El argentino está prácticamente descartado, mientras que los otros tres podrían sentarse en el banquillo pero es improbable que jueguen. Esto, unido a la ya conocida baja de Leo Franco y al castigo a Maniche por su retraso del domingo, convierten la confección de un once en un rompecabezas que el técnico mexicano no resolverá hasta última hora.