Segunda | R. M. Castilla 3 - Vecindario 2
El Castilla deleita y sestea
Tras los goles de Adrián y Negredo, dio vida al Vecindario
El resultado final no refleja, ni mucho menos, las abismales diferencias entre el Castilla y el Vecindario. Uno es a día de hoy la bandera del fútbol rápido y vertical, escaso en una categoría donde impera el estilo ramplón, y el otro es la caridad defensiva y el ataque timorato. Cualidades que aseguran el descenso, del que tan sólo le dista un paso.
Sin embargo, el marcador emparejó estas dos formas de concebir este deporte debido al relax en el que se sumió el Castilla tras su exhibición en la primera mitad. En estos mágicos minutos los de Michel dieron un recital: De la Red dirigió con suficiencia desde la sala de máquinas y Adrián aportó el empuje, la recuperación y la llegada al área necesaria.
Al centrocampista tan sólo le había faltado hasta la fecha golear para quitarse el sambenito de ser hijo de Michel. Y ayer lo consiguió de manera brillante. Aprovechó que Torres le brindó un balón atrás desde la línea de fondo y con un toque sutil colocó el cuero en la escuadra. 1-0.
Después, Negredo se unió a la fiesta y empalmó un soberbio zurdazo desde el corazón del área que entró por el mismo lugar que el primero. Luego empujó el gol de la sentencia tras un servicio de Adrián. En ese momento se llevaban jugados 38 minutos y todo parecía decidido, hasta que el descanso enfrió el vandaval y recordó que en tres días regresa la Liga en la isla maldita: Tenerife.
Así, la segunda parte ofreció una oportunidad a los suplentes, pero ni la motivación ni la solidaridad de sus compañeros beneficiaron a Bueno, Nieto y Granero. Todos fracasaron en el intento y sólo cumplieron. Poco mérito para reivindicar.
El susto.
Entonces el Vecindario aprovechó esa pájara y, por primer vez, comenzaron a dar dos pases seguidos, requisito que debería exigirse en el fútbol profesional y que muchos equipos obvian. Xisco, a media vuelta, y Ciani, tras sentar a Torres, acortaron distancias; pero para entonces el (ahora) padre de Adrián y sus chicos ya tenían los tres puntos en el bolsillo.
Castro Santos
"Hemos tenido nuestras ocasiones pero despertamos demasiado tarde. En la primera parte no hicimos lo que debíamos y la calidad de los jugadores del Castilla ha decidido. No hay que bajar los brazos.
Michel
"Estamos contentos pero debemos quedarnos con el fútbol brillante de la primer mitad. Ahora el equipo está muy seguro y ya no damos una de cal y otra de arena como antes. Tenemos 25 puntos y eso da mucha tranquilidad al equipo.