Así se vive en Budapest la despedida

Por la capilla ardiente instalada en la Basílica de San Estebán, consagrada en honor del primer rey cristiano húngaro y en cuyo seno descansan sólo las grandes celebridades del país magiar, pasaron en la primera jornada de puertas abiertas miles de compatriotas del llorado Cañoncito Pum. Muchos de ellos volverán a acompañarle mañana en su último paseo por las calles de Budapest, ya que se espera que sean más de 50.000 los aficionados que acudan al Ferenc Puskas Stadium con motivo del homenaje al ex jugador madridista.

Antes de abrirse las puertas para que el pueblo magiar despidiera a su gran dios futbolístico, y con la MTV -la televisión nacional- retransmitiendo en directo las exequias, el primer ministro, Ferenc Gyurscsany, y todo su equipo de gobierno, leyendas del fútbol magiar como Rudolph Iluvsky, Valentín Lasszlo (ex jugador y ex seleccionador nacional), el que fuera entrenador de Real Betis, Murcia y Castellón entre otros, Antal Dunai (actual vicepresidente de la Federación Húngara de Fútbol) y la plantilla al completo del Budapest Honved, el heredero del histórico Honved, tributaron un sentido homenaje a Puskas. El frío del exterior se transformaba dentro de las cuatro paredes de la iglesia en calor, respeto y pesar por el fallecimiento de Puskas. Coronas de flores de todos los equipos húngaros, de multitud de embajadas, entre ellas una con la bandera de España de la embajada española en Budapest, un hermoso centro floral del Real Madrid, del Honved... todo realzaba aún más si cabe la belleza arquitectónica de la basílica que adorna el corazón de Budapest en las proximidades de su imperial Parlamento. Y esto sólo ha sido el principio. La explosión popular llegará mañana. A la hora del funeral.

Un funeral en el que trabajan, en su organización, más de mil personas, y que acercarán a la capital húngara a leyendas como Michel Platini, Franz Beckenbauer, muchos de sus ex compañeros en el Real Madrid y grandes personalidades de la política deportiva como Joseph Blatter.

La ciudad entera se prepara para un sábado diferente. Todas las calles del centro se cortarán al tráfico. Nadie quiere faltar a la cita y ya son muchas las tiendas que le rinden culto con velas y fotos conmemorativas de la que dicen era "la mejor zurda del mundo". Por cierto, la biografía escrita por el redactor del diario deportivo Nemzeti Sport, Gyorgy Szollosi, se vende como churros...