Llorente no perdona

Ni en el peor de sus sueños cualquiera de los 25.000 murcianistas que ayer poblaron las gradas de Nueva Condomina hubieran podido imaginar el regalo envenenado que les esperaba. Con todo preparado para festejar un día inolvidable, apareció el Valladolid (de largo el mejor equipo al que se ha medido hasta la fecha el once grana) para dejar al descubierto los defectos del Murcia. Estuvo a merced del cuadro de Mendilibar cuando el partido estuvo igualado en el arranque, cuando se le puso de cara tras el 1-2, y tras la expulsión de Peña antes del descanso. También cuando el choque se convirtió en un querer y no poder por parte de un Murcia que, en el colmo de los despropósitos, falló dos penaltis en la segunda parte.

Todo el gafe que ha rodeado a la institución murcianista en sus casi 100 años de historia se concentró, como si de un cocktail mortal se tratara, para avisar de que, pese al cambio de escenario, los fantasmas que han minado una y otra vez las aspiraciones de la afición local siguen presentes. Porque fue eso, una auténtica catástrofe en un día señalado en el calendario del murcianismo que nadie se podía creer.

El Valladolid fue mejor y punto. Firme en defensa con Baraja y Bea, que volvió a tener un duelo de alto voltaje con Iván Alonso, y dominador en el medio con un omnipresente Borja y con un talento con ese fútbol que al Murcia le falta en la zona ancha: Álvaro Rubio. Víctor, Capdevila y Sisi fueron mortales en el uno contra uno y, por encima de todos, un Llorente con hambre insaciable de goles. Hizo dos y provocó un penalti. Está que se sale.

Demasiados argumentos para un Murcia en el que sólo se salvó un admirable Iván Alonso y sólo le sobró el salivazo a Bea. Lo dicho, un desastre total, una mal sueño.

El césped sigue levantándose

Han pasado más de un mes desde que un España-Argentina inaugurara la Nueva Condomina, pero el césped sigue estando en un estado lamentable.

Mendilibar

"La calidad del Murcia y el ambiente del nuevo estadio podían jugar en nuestra contra y por eso hemos salido muy fuertes. Ahora mismo, la clasificación dice que somos los mejores, pero queda mucho"

Lucas Alcaraz

"Sabíamos que el Valladolid es uno de los mejores de Segunda, pero no esperábamos tener mala suerte. Toca levantarse, limpiar la cabeza y volver al trabajo con toda la concentración del mundo".