Primera | Athletic
Mestalla marcará el futuro de Sarriugarte
Una derrota con mala imagen finiquitaría el crédito que le queda
La dolorosa derrota en Mallorca ha dilapidado buena parte del crédito que mantenía en la afición y directiva Félix Sarriugarte. Aunque los futbolistas no estén exentos de reproches y sean tanto o más culpables del asunto, desde el Athletic se empieza a dudar seriamente sobre la continuidad del técnico. El preparador de Zaldibar deberá dar un golpe de timón en Mestalla para salvar este obstáculo. Una mala imagen con derrota ante el mermado equipo valenciano, metido en líos de todo tipo, podría acarrear una pérdida definitiva de confianza. Valencia y, en el mejor de los casos, Montjuïc, serían sus dos últimas balas. Sarriugarte está en peligro.
Ha escocido mucho la sensación de que la Copa, el único asidero de ilusión que le quedaba al aficionado, no se haya abordado con la intensidad y mimbres necesarios en el partido de vuelta, con la eliminatoria abierta tras el 1-1 de San Mamés. La alineación, plagada de suplentes con escasas oportunidades en lo que va de año, condenó al Athletic a ofrecer una pésima imagen, por mucho que el partido se enderezase en la segunda mitad, entre otras cosas porque el Mallorca no es el Sevilla, ni el Barça, ni el Zaragoza. La sensación de impotencia en la prórroga, más achacable a los futbolistas, agravó el asunto.
Los datos están ahí. El Athletic sólo ha logrado una victoria en once encuentros de competición oficial. Sarriugarte tiene un punto más que Mendilibar en la novena jornada y al menos respira porque hay tres peores en la Liga. Por contra, su paisano había logrado mantener al equipo en la Copa, con un triunfo ante el Real Unión.
Cierto es que San Mamés no ha mostrado públicamente su exigencia de cambio y que está en manos de la directiva la decisión de ratificar su confianza en él o quitársela. Repartidos como han estado los directivos -tres con el equipo en Mallorca, otros en Bilbao y hasta un vicepresidente, Fermín Palomar, de viaje hasta ayer en Argentina- no es sencillo abordar en horas un asunto tan vital. Así que la junta esperará al comportamiento del equipo en Mestalla para tomar cartas en el asunto.
Sarriugarte ha mostrado hasta ahora una tremenda confianza en la progresión del equipo, aunque la sensación es que el trompazo que se llevó en Palma le dejó tocado. Esa fe en lo que hace es la que le lleva a tratar de forjar un once que dé la campanada en Valencia y aire a todo el grupo, que la necesitan.