El fichaje de Aranburu, una opción interesante

Los rectores deportivos del Athletic han debido aprender la lección de esta temporada y no están dispuestos a que la primera plantilla quede coja en algunas posiciones. Aunque la actual junta directiva termine su mandato en junio y con ellos corra peligro el organigrama técnico, el club rojiblanco está abierto a las posibilidades de acometer operaciones interesantes para reforzar el equipo antes de las elecciones.

La sanción de Carlos Gurpegi, que salvo sorpresa no podrá jugar tampoco la próxima campaña, ha evidenciado una clara carencia en una de las posiciones más determinantes, la del doble pivote. Desechadas las opciones de Bordas, Felipe y Solabarrieta, lesionado para tiempo Tiko, y sin clara proyección en ese puesto en el filial, el Athletic debe estar atento al mercado. Y éste presenta la posibilidad de contratar a un futbolista muy interesante, con bagaje en Primera, y enorme calidad. Mikel Aranburu está en la misma situación contractual que Igor Gabilondo. Termina el contrato el 30 de junio, pero la Real tiene de plazo para renovárselo unilateralmente por un año más antes de esa fecha. Ya se habla de él.

El azpeitiarra, que con 27 años tiene más de doscientos partidos ligueros a sus espaldas, está siendo observado por la dirección deportiva de la Real de cara a tomar una decisión de futuro. Nadie duda de su enorme calidad, pero el club txuri urdin pretende comprobar que ha superado definitivamente la grave lesión en su rodilla derecha que le produjo una entrada del racinguista Oriol.

El propio futbolista desvelaba a AS hace unos días que termina su contrato en junio de 2007 y que el club tiene una opción por otro año, aunque su agente aclara que, sólo por esa cláusula, no es un jugador libre. "Sólo me queda esperar, pero no es lo que más me preocupa. Aún hay tiempo por delante. El día que quieran hablar, ya me llamarán. Tampoco quiero darle vueltas porque no depende de mí", explica el talentoso jugador.

Nadie en San Sebastián piensa que la Real no ofrecerá una renovación a Aranburu, aunque medirá los tiempos, incluso jugando con la posibilidad de estar en Primera o Segunda. El Athletic estará ahí, con la escopeta cargada.