El Castilla pasa un test para prevenir lesiones

La plantilla del Castilla se sometió durante el lunes y en el día de ayer a un test de fuerza isocinética en la Clínica de La Fraternidad con el objetivo de prevenir lesiones musculares a lo largo de la temporada. El médico del filial, Francisco Morate, fue el encargado de realizar las pruebas en las que se mide la reacción de la musculatura del tren inferior de los futbolistas.

En estas pruebas se mide la fuerza máxima (tanto en los cuádriceps como en los isquiotibiales) y la resistencia de forma concéntrica, así como la excéntrica de los isquiotibiales.

Una vez que los médicos del Real Madrid han hecho el análisis, deberán esperar una semana para obtener los resultados, con los que eleborarán un informe detallado sobre el trabajo físico específico que necesita cada jugador. Esta información pasará al preparador físico del Castilla, Javier Hernández, para que ejecute la teoría sobre el césped.

Según informó Francisco Morate a AS, "el test se realiza con una máquina con software en la que los jugadores deben ejecutar varios ejercicios". Morate explicó que "la intención es la de ver si los futbolistas tienen desequilibrios entre unos músculos y otros para saber con precisión a qué tipo de lesiones son más propensos y qué ejercicios deben realizar para prevenirlas. Con este test se pueden evitar muchas desgracias como las lesiones de menisco que muchas veces se provocan por el desequilibrio muscular".

Se vacía la enfermería del filial

Los jugadores que estaban lesionados y con los que no podía contar Michel ya están recuperados de sus dolencias musculares. Ángelo ha sido el último en abandonar la enfermería tras superar sus problemas musculares. Unas molestias que le han privado de debutar esta temporada con el filial blanco. El único jugador que continúa de baja es Dani Guillén. El lateral izquierdo sigue con su proceso de recuperación tras ser operado el pasado 1 de septiembre de una luxación en su hombro izquierdo. Reaparecerá en enero.