"Ojalá consiga cien más"

A Raúl Tamudo aún le queda cuerda para rato, así que no podemos decir que lo vivido ayer en la Ciudad Deportiva de Sant Adrià fuera un homenaje, acto que se acostumbra a realizar cuando uno está para retirarse o ya lo ha hecho. Después de mover mar, cielo y tierra, el futbolista de Santa Coloma de Gramenet se encontró con una fiesta que en principio tenía que ser sorpresa, pero que al final no lo fue. Dejémoslo así. ¿El motivo? Los cien goles que ha conseguido con el equipo profesional blanquiazul desde que arrancó como tal en 1997.

El acto fue emotivo. Bonito. Cuco, si permiten la expresión. El futbolista se vio rodeado de todos los estamentos del club y de los suyos. Se encontró cómodo, aunque a Tamudo, la verdad sea dicha, estas historias no le van mucho. Su timidez a veces le gana, pero hizo un esfuerzo para contener las lágrimas que al final le humedecieron las mejillas. "No estoy acostumbrado a este tipo de actos y la verdad es que estoy muy agradecido por el esfuerzo realizado por el club", dijo el futbolista ya tranquilo, una vez finalizado el acto.

Tamudo estuvo acompañado por Luis García, Albert Riera y Javi Chica, rodeado, eso sí, de más de un centenar de niños que deben ser el vivero del que debe nutrirse el Espanyol en el futuro. Éstos alucinaron y se lo pasaron en grande con uno de sus grandes ídolos y referencias. Evidente. Ven que el futbolista ha llegado muy lejos en lo que esperan que algún día sea su profesión y su modo de vida.

Ilusión. Es la que tiene Tamudo por seguir anotando como blanquiazul, pero no tiene prisa. El récord de Rafa Marañón parecía inalcanzable hace unos años, pero ahora sólo le distancian 11 tantos. "No tengo prisa por lograrlo. Las cosas, para que salgan bien, se tienen que ir haciendo poco a poco. Ojalá pudiera conseguir cien más, ya que hay pocas cosas que quiera más que este escudo y estos colores", indicó.

La verdad es que no debe ser sencillo jugar a un nivel altísimo y estar siempre en boca de todo el mundo. Y recibiendo críticas. Tamudo puede ser tímido y reservado, pero cuando entra en el terreno de juego se transforma. El club y el fútbol base le organizaron una fiesta para celebrar ese olfato goleador que Dios le dio y del que vive el Espanyol.

Se queda con el gol ante el Murcia

Raúl Tamudo será recordado siempre como el futbolista que ha conseguido los goles imposibles. Cuando el equipo estaba necesitado y parecía abocado al descenso hace tres temporadas, consiguió un gol que cambió la vida del club y posiblemente la suya. En aquel dramático partido ante el Murcia, Tamudo rompió la defensa del equipo grana y se metió, por pleno derecho, en la historia del club. "Me quedo con ése. Fue importantísimo para el club, ya que logramos quedarnos en Primera", aseguró.