"Seré hincha de España"

Con deportividad y serenidad. Así encajó Raúl González su exclusión de la lista de convocados facilitada ayer por Luis Aragonés para los próximos dos partidos que disputará la selección española.

El delantero llego a Valdebebas a las 10:25 para preparar el derby. Saltó al terreno de juego a las 11:25 y allí intentó abstraerse de los tímidos gritos de apoyo de la grada, aunque no pudo evitar ser el centro de todas las miradas. El capitán recibió la noticia en los vestuarios al finalizar la sesión. Aunque no puso mucho empeño en escuchar en directo la comparecencia del seleccionador, Raúl no pudo evitar enterarse del bombazo. La zona mixta de la Ciudad Deportiva era un hervidero y en cuanto Aragonés acabó de nombrar a los convocados, la noticia se expandió. Y llegó a oídos de Raúl.

El siete terminó de ducharse y, sabedor de que los periodistas le esperaban a la salida, decidió marcharse por la puerta de atrás. Raúl se subió a su Audi Q7 y apenas se dejó ver ya que su coche lleva los cristales ahumados. Se despidió de los empleados del club con el mismo gesto serio de siempre y se marchó de Valdebebas sin hacer declaraciones.

Todos los medios de comunicación intentaron contactar con el entorno de Raúl pero, mientras, preguntaron a sus compañeros para pulsar la opinión del madridismo. Ninguno de los jugadores del Madrid quisieron hacer declaraciones pero sus caras denotaban sorpresa y contrariedad. La misma que mostraban muchos canteranos que, tras finalizar sus respectivos entrenamientos, se dirigían a los periodistas para comprobar que los rumores se confirmaban. Cuando supieron la respuesta, el gesto fue unánime: desilusión y enfado.

Raúl prefirió no pronunciarse en cada uno de los medios que se lo pidieron y sólo dio su opinión a la Agencia EFE: "Lo importante es la selección. Hay que estar unidos y apoyaré con toda mi alma a la selección desde mi casa. Veré el partido por televisión y siempre seré el hincha número uno del equipo nacional. Soy un futbolista más y ahora mismo lo que deseo es empujar para que mis compañeros obtengan un buen resultado en Suecia, donde nos jugamos buena parte de los puntos para estar en la próxima Eurocopa".

Sin rencor.

El ariete evitó polemizar con Aragonés: "Tengo un profundo respeto por toda la gente que trabaja en el equipo. Es la decisión del entrenador. Animaré con todas mis fuerzas al equipo. No quiero ninguna polémica y respeto su decisión. El fútbol español y la selección están por encima de los intereses particulares".