Ana Urkijo ya ejerce de líder del Athletic

Todavía no es la presidenta del Athletic, pero como si lo fuera. Ana Urkijo quiso dejar constancia de su presencia al frente de la expedición rojiblanca y paseó con elegancia su sonrisa desde que llegó al aeropuerto de Loiu hasta que, sobre las ocho, el equipo llegó al Hotel Abascal, donde recogió las inquietudes de la decena de aficionados bilbaínos que allí se congregaron. Repartió besos y alegría a diestro y siniestro, desde el entrenador al utillero, Txetxu Gallego. Significados abrazos y muestras de ánimo recibieron Pablo Orbaiz, Javi Martínez, José Angel Iribar y Félix Sarriugarte. Estuvo acompañada por un único directivo, Fede Arruti, Daniel Ruiz Bazán (su presencia en Madrid no estaba prevista a principios de semana) y el director general del club, Jon Berasategi.

La vicepresidenta, que elude hacer declaraciones por la difícil situación institucional en la que se encuentra el club, no es la primera vez que viaja como máxima representación de la entidad. Ya lo hizo en una fecha señalada, en la derrota en Cádiz de la pasada campaña, una jornada que supuso un punto de inflexión negativo para el entonces técnico José Luis Mendilibar. Urkijo, muy preocupada como toda la directiva ante el precedente que supone que el presidente se vea en la tesitura de tener que dejar el cargo dos años antes de lo que se votó en las urnas, está dispuesta a asumir la responsabilidad en el caso de que Fernando Lamikiz se marche.

La abogada, que ya rompió moldes al convertirse en los años noventa en la primera directiva del Athletic, cenó con toda la plantilla y hoy comerá con el presidente del Getafe, Ángel Torres. No pudo ocultar su sonrisa al ver a una pareja de recién casados retratarse con algunos futbolistas de fondo. "Unos de boda y otros casi de funeral", se atrevió a lanzar un aficionado. Es de esperar que todos ellos tengan esta noche la misma felicidad ganando al Getafe.