Mané: "Firmo el ascenso del Almería y del Cádiz"

José Manuel Jiménez Ortiz fue una de las tantas promesas de la provincia de Cádiz que se vieron obligadas a emigrar al no encontrar ninguna referencia en el fútbol profesional. Era el año 2000, con un Cádiz más cercano a la desaparición que al retorno a Segunda cuando Mané comenzó a triunfar en las filas de la Balompédica Linense. Fue el conjunto albinegro el que le abrió las puertas de marcharse a Segunda B, al Díter Zafra. Un ojeador colchonero lo vio y se lo llevó al año siguiente, temporada 2003-2004, al Atlético B. Ya entonces el Cádiz puso su mirada en el tarifeño, que acabó la pasada temporada en el Ciudad de Murcia. Hasta que llegó el momento clave.

Tras varias conversaciones de Muñoz con su representante, fue en un hotel de El Puerto de Santa María donde se alcanzó un principio de acuerdo entre el padre del futbolista y el propio Mané para que vistiera la elástica amarilla.

A sus espaldas, el representante negociaba con el Almería un contrato muy superior económicamente al que le ofrecían los amarillos. De nuevo poderoso caballero fue don dinero y el Cádiz se quedó 'tirado' ante la ira del propio presidente amarillo, que vio en el apretón de manos una rúbrica de caballeros que no se cumplió. Mané se fue al Almería y mañana le toca enfrentarse a su equipo carnal, el amarillo, del que no reniega: "La tierra tira muchísimo. Se quiera o no, Cádiz es mi tierra y lo voy a defender siempre a muerte. Firmo que subamos los dos equipos a la máxima categoría esta temporada".

A pesar de todo lo acontecido en este asunto ya olvidado por las tres partes, hoy Mané lo recuerda como una mera anécdota: "Se montó un culebrón. Fueron las circunstancias. Tenía que valorarlo todo, pensarlo bien y decidí irme a Almería. Hay que mirarlo todo, no sólo el dinero. En la entidad almeriense me vendieron un buen proyecto a medio plazo para conseguir el ascenso a Primera División. Pero esto no es una cosa que pidan ya, por eso el club ha optado por incorporar a gente joven, para hacer un equipo desde la base".

Su padre: "Esta semana no animaré al Cádiz"

El mundo del fútbol da algún que otro revés. La ilusión del padre de Mané era ver a su hijo de amarillo, pero en esta ocasión cambiará por el albirrojo: "Un padre siempre tiene y debe estar del lado de su hijo y dejará a un lado el sentimiento amarillo este fin de semana". El zurdo sabe lo que se pierde en su situación actual y admira a los cadistas. "El Cádiz va a llamar la atención siempre allá donde vaya. Es un equipo llamado a luchar por el ascenso a Primera División. Sería muy importante para la ciudad volver a disfrutar de nuevo de su equipo en la categoría de oro. Todo el mundo de allí se lo merece", destacó el padre de Mané, que se siente muy cadista.