Contento y sereno. Después de tanta incertidumbre, Javier Calleja ya estaba seguro ayer de que es jugador del Málaga para las dos próximas temporadas y no ocultaba para nada su satisfacción. Sentado al lado del nuevo presidente, Fernando Sanz, el zurdo tenía claro porque ha venido a la capital de la Costa del Sol: "Estoy en un club histórico y estoy aquí para devolverlo a Primera División junto a mis compañeros. Ése es su sitio. Vengo porque han confiado en mí y porque Málaga es como una segunda casa para mí. Ahora, todos debemos luchar por un mismo objetivo y tengo muchas ganas de empezar a trabajar para alcanzarlo".
Después de seis años en la máxima categoría, Calleja sólo sueña con volver, pero ahora vistiendo de blanquiazul. Para ello tendrá que recuperarse físicamente y es que el madrileño quiere conseguir en Málaga la continuidad que las lesiones le negaron en Villarreal: "La idea es jugar lo máximo posible, siempre con el objetivo de ayudar al equipo. De momento estoy trabajando el físico porque llevo una semana de retraso con respecto a mis compañeros".
Las negociaciones se han descongelado tan rápido como se pararon hace una semana y ahora el jugador ya sólo piensa en el nuevo reto que le espera: "Antes estaba pendiente de lo que pasaba en el entorno pero ahora estoy tranquilo porque la situación se ha estabilizado. Me encuentro dentro de un proyecto que me ilusiona porque el Málaga está en Segunda por circunstancias. A nosotros nos tocará hacer que vuelva a estar entre los mejores".
Bóvio se marcha al Panathinaikos griego
Mientras unos vienen, otros se van. Éste es el caso de Ricardo Bóvio, que ayer hizo oficial su adiós para marcharse cedido al Panathinaikos griego. "Hemos llegado a un acuerdo con el Málaga para jugar un año en el Panathinaikos. Es una oportunidad muy buena para mí y no podía dejarla pasar", explicó el brasileño ayer por la tarde. "No es que no quiera jugar en Segunda, me sentía muy a gusto en Málaga, pero así podré jugar en la UEFA y es una posibilidad a la que no podía decir que no. Desde Grecia seré un malaguista más", confesó.
