Primera | Athletic
"Quizás tenga que echar un poco más de genio"
Llorente apuesta por el trabajo para "aportar mucho a este club"
El Athletic tiene delantera para largo. El fichaje de Aritz Aduriz ha supuesto un poso de tranquilidad ante la evidencia de que Ismael Urzaiz no es eterno. Pero a quien realidad se esperaba como sucesor del tudelano es a Fernando Llorente. El riojano retrocedió en su proyección en el complicado año anterior y se ha dado cuenta de que necesita un impulso desde la humildad, desde el trabajo. Quiere ganarse a San Mamés, recompensar al club por la reciente decisión de revisar y ampliar su contrato. Sin ir de divo, porque todavía se siente un proyecto de jugador, pretende que sus compañeros confíen en él, que tengan en él una referencia arriba cuando esté en el campo. Va por el buen camino.
"No puedo decir qué nivel voy a dar. Creo que puedo ayudar mucho a este club, ahora mismo tengo que mejorar muchos detalles, muchas cosas. El trabajo me puede dar ese plus que necesito para gustar a la afición". Llorente, en plena recuperación de su tobillo izquierdo, vuelve a estar ilusionado. No soportó la presión a la que le sometió Javier Clemente, con quien pasó "un año muy duro". "No te esperas que te puedan llegar a pasar ciertas cosas. Dices, ¿qué he hecho yo para pasar estos momentos tan malos?", rememora. De hecho, en la concentración de Benasque llegó a pedir a su agente que le buscase un equipo para ir cedido. Con el cambio de técnico, se le abrió el cielo al joven jugador.
Lamikiz le ha arreglado su contrato por segunda vez desde que es presidente. "Tengo que estar agradecido, la renovación ha llegado en un momento que no era el mejor para mí. El club ha depositado toda su confianza y eso es importante para mí", argumenta.
Quiere mirar hacia adelante, por eso pretende dar un salto en un aspecto que se le achaca en La Catedral, su excesiva frialdad. "Es una de las cosas a mejorar, quizás tenga que echarle un poco más de genio en algunos momentos del partido", asegura bajando a la tierra. Es chico listo. Explica la causa de su bajón: "Me lo va a dar el trabajo, si físicamente estoy bien, podré hacer mayores esfuerzos. El año pasado me faltaba eso, me tenía que reservar para estar fresco en ataque". A Llorente se le ve maduro y decidido a marcar diferencias. Tiene clase y tamaño para rebosar. Sólo le falta aplicar sus ideas. Lo hará.