Los 'hijos de Juanito'
Manu y Gámez siguen los pasos del genio de Fuengirola

Como Juanito no habrá otro. Ha sido el futbolista malagueño más grande de la historia". Los herederos del irrepetible Juan Gómez visitan el Santiago Bernabéu con la camiseta del Málaga. Como el mítico siete, Manu Sánchez y Jesús Gámez son naturales de Fuengirola. Ídolo, ejemplo y genio. Nadie olvida una figura que caló hondo en una cantera que renace con dos de sus paisanos en la élite. Dos jugadores que un día soñaron ser como él. "Siempre ha sido un ídolo. Además, soy amigo íntimo de sus hijos Roberto y Juan David. Para la gente de Fuengirola como Jesús y como yo es un orgullo que él fuese de allí y haya representado tanto. Para el Bernabéu también significa mucho. Siguen nombrándole más que a nadie, le recuerdan en el minuto siete de cada partido. Eso para alguien de Fuengirola...", sentenció emocionado un Manu que pasó siete años en la cantera madridista.
Vecinos. Recién llegado a Primera, el joven Jesús Gámez no vio al crack hacer diabluras sobre el césped. No obstante, con apenas tres años, Juanito le acunó: "No tuve la suerte de verlo jugar en directo, pero vivía cerca de mi casa. Mi padre tenía un bar y él aparecía mucho por allí. De hecho, me tuvo entre sus brazos cuando era un bebé. Es un mito, tiene su pabellón, monumentos y premios a su nombre. Por cierto, recibí uno hace poco. Se lo ha merecido. Que en aquella época saliese un futbolista del pueblo... Todos lo recuerdan y lo recordarán. Fue grande con el Madrid y con la Selección. Nadie olvidará a Juanito".
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Jesús Gámez amplió su contrato hasta 2010
Jesús Gámez amplió su compromiso hasta la temporada 2009-10 con el Málaga. El lateral derecho de Fuengirola, que quedaba libre en 2007, firmó ayer su primer contrato profesional y cumple su sueño de ser jugador blanquiazul de pleno derecho. La operación resultó muy sencilla después del principio de acuerdo que alcanzaron hace dos semanas. El representante del canterano, Antonio González Flores, acudió en la mañana de ayer a las oficinas de La Rosaleda junto al futbolista y su padre para sellar el acuerdo con el director general del club, Antonio Mendoza. La reunión duró menos de una hora y ambas partes se mostraron "satisfechas". La cláusula de rescisión del defensa malagueño es de 12 millones de euros.




