Clemente insiste en una terapia de diálogo

Diálogo. Ese es el camino elegido por Javier Clemente para sacar al Athletic del agujero clasificatorio. Así, lejos de organizar entrenamientos de larga duración, como es el caso de Gonzalo Arkonada en la vecina Real Sociedad, o de revolucionar el sistema de trabajo (algo habitual en la mayoría de clubes que optan por un cambio en la dirección técnica) el ex seleccionador apuesta por la comunicación como la vía ideal para obtener los tres puntos en Santander. Y, a partir de ahí, disparar al equipo hacia los puestos que libran del descenso a Segunda División.

Ayer, en Lezama, el equipo vivió otra jornada de silla y televisión. Sentados frente al vídeo, los jugadores escucharon las explicaciones del entrenador, que esta vez se apoyó en una pantalla de vídeo. Clemente concede especial protagonismo al diálogo. Es lo que más ha hecho desde que llegó a Bilbao para tomar el relevo de José Luis Mendilibar. En cuanto tiene ocasión habla con sus jugadores.

Análisis del rival.

La charla arrancó poco antes de las 10.30 horas y cuando Clemente la dio por concluida los futbolistas regresaron a la zona anexa del vestuario para recibir una sesión de baño y masaje. Fue entonces cuando los lesionados y Aranzubia saltaron al campo para realizar una suave sesión de ejercicios al aire libre.

En la extensa comunicación, el preparador repasó los errores propios y analizó los aspectos determinantes del rival. Entre ellos, que el Racing es un equipo que se encuentra cómodo jugando a la contra. Están avisados.

Nueva charla mañana en Santander

Clemente repetirá charla mañana en el hotel de concentración del equipo en Santander. El técnico, que a primera hora dejará que sus jugadores den un pequeño paseo por los alrededores del establecimiento, citará al grupo antes del mediodía en un salón dispuesto expresamente para el conjunto rojiblanco. Y, casi coincidiendo con la salida de los primeros autobuses de hinchas hacia El Sardinero, 'el rubio' ofrecerá la alineación y las líneas maestras de lo que quiere que sea el juego de sus futbolistas en terreno cántabro. Igual que ayer, tampoco tendrá prisa. En Málaga, por ejemplo, Clemente estuvo frente a sus jugadores durante una hora y media. Todo un partido.