El derby de Caparrós y encima, Pino Zamorano

Decir que Joaquín Caparrós, sevillista de corazón, se motiva de manera especial cuando tiene enfrente al Betis no es noticia. Aunque ahora esté en Riazor, en este tipo de compromisos, y en palabras suyas, le hierve su sangre roja. No deja de ser paradójico que durante esta semana algunos jugadores de la plantilla verdiblanca hayan destacado las excelencias del entrenador utrerano. Es el caso de Assunçao o Toni Doblas quien, aprovechando que se está sacando el título de entrenador, ha comentado que le gustaría ser dirigido algún día por el ex sevillista. Sentimientos aparte, hoy asistimos a un partido de extraordinaria importancia. El Betis evidenció en Zaragoza unas lagunas defensivas alarmantes que ni el hat-trick de Dani pudieron paliar, mientras que los gallegos están estropeando en casa todo el buen trabajo que desarrollan fuera. Este es un tren que lleva a Europa, pero, por si las moscas, se ha inscrito en la Intertoto. No sé si será el camino que emprenderá el Betis en vista de lo mal que lo está haciendo en esta complicada e irregular temporada.

Cambiando de tercio, mucho me temo que el árbitro de turno la va a liar para variar. Previsible si tenemos en cuenta que hoy pitará (es un decir) 'Sin Tino' Zamorano, el colegiado que le formó el 'jari' al Betis en el Camp Nou a base de pitar penaltis y prolongar aquel partido lo necesario para que el Barcelona empatase. Malos tiempos para el arbitraje. El Depor tampoco acabó demasiado contento con Medina Cantalejo en su partido copero contra el Espanyol. A ver qué pasa.

Y para terminar, unas líneas para Paco Gallardo, 'el Garrincha de Nervión' (porque le gusta el regate). Caso curioso el suyo. Hace tres años, el Deportivo ofreció al Sevilla 3,6 millones de euros (el Celta llegaba a tres). No fue vendido. El año pasado no rascó bola en el Getafe y ahora Caparrós le ha repescado tras su extraña salida de Guimaraes. Hoy hasta podría tener minutos. La vida te da sorpresas, sorpresas...